Antonio Kusanovic y María Victoria Imaz viven en la provincia de Santa Cruz y se dedican a la producción ganadera (vacas y ovejas) y al turismo, que resultó ser su principal fuente de ingresos y la único opción para no abandonar la estancia cuando las cosas se complicaron en la década del noventa.
-¿Dónde están ubicados exactamente?
-En la estancia La Angostura, a 50 kilómetros de la localidad de Gobernador Gregores, sobre el río Chico, provincia de Santa Cruz.
-¿A qué se dedican?
-Somos productores ganaderos de ovejas Merino y vacas Hereford (vendemos los terneros) y también hacemos turismo rural.
-¿Desde cuándo y por qué comenzaron?
-En 1993, como opción para no abandonar la estancia por la crisis económica de los ’90, reforzada porque en 1991 nos agarró la erupción del volcán Hudson que nos dejó sin ganado. Literalmente nos fundimos y había que seguir de alguna manera. Ahí el INTA nos apoyó con un licenciado en Turismo que nos ayudó a armar nuestra propuesta turística.
-¿En qué consiste su propuesta?
-Somos un alto en la ruta: estamos de paso camino a Calafate, sobre la Ruta 40 vieja, y la estancia es una parada para pernoctar, comer un asado, tomar un desayuno campestre y seguir viaje. También recibimos observadores de aves. Muchos en busca del macá tobiano, una especie endémica que atrae la atención de aficionados y especialistas de todo el mundo.
-¿Quiénes son sus visitantes? ¿Qué buscan?
-El 95% es turismo europeo, más que nada alemanes y holandeses, pero en general de toda Europa. Buscan la inmensidad y la soledad de la Patagonia, descubrir la estepa sin gente.
-¿Usan energías limpias en la estancia?
-Tenemos paneles solares y aerogeneradores para energía y también un calefón solar para agua caliente. Lo pusimos porque acá sobran el sol y el viento y para ahorrar en costos de gas, que es muy alto.
-¿Tienen alguna otra iniciativa sustentable?
-Tenemos un invernáculo para producir algo de verdura fresca. También frutales y algo de berries; hacemos dulce para la temporada.
-¿Cómo los ha afectado el Covid?
-Bastante, ya que no es posible abrir el establecimiento, lo cual nos afecta mucho porque el turismo era casi el mayor ingreso, más que la ganadería.
-¿Hay grieta entre la gente del campo y la ciudad? Si es así, ¿a qué creen que se debe?
-Hay una grieta porque la gente de la ciudad cree que todo el mundo que vive en el campo es terrateniente y por ende millonario, cosa que no es así.
-Es un tema para un largo debate…
-Sí, lo mismo que lo que le pasa al productor agropecuario, que en este país no tiene nada de apoyo del Estado… Pero ese también es otro tema para un largo debate.