“En el marco de las negociaciones que se vienen desarrollando entre la Unión Europea y el Mercosur en pos de la suscripción de un acuerdo de libre comercio, la UE ha solicitado la protección en la República Argentina de un Listado de Indicaciones Geográficas y Denominaciones de Origen protegidas, otorgando reciprocidad de trato para el Listado de Indicaciones Geográficas reconocidas en la Argentina”.
Este es el escenario. Lo define la Resolución 319-E/2017 del Ministerio de Agroindustria que fue publicada este miércoles en el Boletín Oficial. En la misma se instrumenta un procedimiento para la publicación, difusión, recepción de objeciones y formulación de dictámenes técnico-jurídicos respecto de una larga lista de Indicaciones Geográficas (IG) y Denominaciones de Origen (DO) que los europeos, inventores de este tipo de sellos, quieren que se respeten en estas costas.
No está todo cerrado. La Resolución de Agroindustria aclara que a partir de la publicación de la lista de denominaciones europeas “toda persona humana o jurídica, estados provinciales y terceros países podrán presentar objeción fundada a las solicitudes de protección”, Por ejemplo, si considera que la DO solicitada por la UE resulta ser aquí “un nombre genérico del producto, entendiéndose por tal aquel que por su uso ha pasado a ser nombre común del producto con el que lo identifica el público en la República Argentina”.
El caso típico para entender esa posible diferencia es el de los vinos Rioja, que la UE defiende como una denominación de origen. Tienen todo su derecho a patalear los productores vitivinícolas de La Rioja. Por esto ya hubo un conflicto en 2012.
Recuerde la historia de la pelea por los vinos de La Rioja
Las quejas podrán ser presentadas ante el Instituto Nacional de Vitivinicultura o la Dirección Nacional de Alimentos en un plazo de 30 días luego de la publicación de la lista de DO presentada por la Unión Europea. Luego de ese habrá un plazo similar para que las autoridades nacionales emitan un dictamen al respecto.
La lista todavía no se publicó. Pero en junio pasado, en el marco de negociaciones similares entre la UE y China, ambos bloques dieron a conocer una lista semejante de cerca de 100 productores.
Puede descargar ese listado desde aquí.
La lista de los productos de la UE que buscan tener protección en China incluye, por ejemplo, la cerveza de Baviera (Bayerisches Bier), el queso Feta, el queso manchego, el champán, el queso Gorgonzola y el vodka polaco (Polska Wódka). También el vino Rioja.
“La posible protección en la Argentina de las Indicaciones Geográficas (IG) y las Denominaciones de Origen (DO) solicitadas por la UE estará supeditada a la conclusión satisfactoria de las negociaciones del Acuerdo de Libre Comercio”, aclara la resolución. Es decir, todo dependerá de la negociación general entre el Mercosur y el bloque europeo.
Se supone que si ese acuerdo prospera habrá una protección semejante de los productos argentinos con DO e IG en el viejo continente. No son muchos éstos. O mejor dicho, son mucho menos que los que han sabido construir los europeos.
Aquí puede conocer el humilde seleccionado nacional de DO.
Entre los productos locales con denominación de origen figuran los salames de Tandil, los de Colonia Caroya, la yerba mate argentina, el corderito patagónico, el chivito criollo del norte de Neuquén, el alcaucil platense y el melón de Media Agua de San Juan.