Los productores algodoneros brindan este año con el vaso medio lleno. La cosecha está dando buenos resultados. En Chaco tiene 90% de avance y rindes de 1.500 kilos de algodón en bruto, mientras que en Santiago del Estero, donde hay productores más grandes que pueden utilizar más tecnología de insumos e incluso hay campos con riego, los rendimientos rondan los 3.000 kilos.
Pero el vaso tiene una parte vacía importante. El coronavirus dejó sin mercado a los productores algodoneros. La cuarentena complicó a toda la cadena textil. Los comerciantes no venden ropa, las industrias no fabrican y el productor no tiene quien le compre el algodón. Ya lo venimos contando en Bichos de Campo.
Los precios por kilo de fibra son a modo de referencia, porque en realidad no hay demanda y tampoco negocios. Ese valor es de 1 dólar cuando el promedio de las últimas campañas fue entre 1,30 dólares, con picos de 1,50 dólares, según explicó Héctor Linke, presidente de la Asociación de Productores Algodoneros con sede en Chaco.
“No se puede vender, no hay demanda. La industria está parada, los shoppings y tiendas están cerrados y la industria textil sufre muchísimo”. Así resumió Linke el impacto de la cuarentena sobre esta cadena productiva.
“Supongamos que vendemos; se está perdiendo toda su ganancia y eso va a complicar en cuanto a seguir sembrando y produciendo”, advirtió el dirigente rural, quien se quejó por el impacto de las retenciones sobre esta economía regional. “Complican las retenciones, que son del 5%, que es mucho cuando se está produciendo prácticamente al costo”, indicó el dirigente.
Según Linke se está tratando de encontrar una salida a la cuestión porque “al no haber ventas el productor va a quedar en el camino, pero lo que veo es que no podemos siquiera plantear una propuesta, no hay viabilidad. Creo que después de la pandemia los precios podrían aumentar. Si esos valores suben y sacamos las retenciones estamos acomodando el presupuesto para seguir adelante, pero en estas circunstancias estamos muy complicados”, afirmó.