Las devaluaciones suelen hacer estragos en actividades como la producción de leche, que transforma granos que cotizan en dólares por un alimento que se vende mayormente en pesos, ya que cerca del 80% del total se coloca en el mercado doméstico. Además lo que se exporta se liquida al dólar oficial menos retenciones y esos son los pesos que ingresan a la cadena.
Así el dólar leche es el mayorista Banco Nación -que no llega a los 77 pesos- menos el 9% de derechos de exportación a la leche en polvo, por lo que queda en torno a 70 pesos. El oficial con impuestos incluidos es 90% más caro que el dólar que reciben las lácteas. El dólar informal, que es el único que circula en las calles, es 120% más alto.
“Las vacas comen dólares y producen pesos”, es una frase acuñada por Andrea Passerini, flamante coordinadora nacional de lechería de CRA (Confederaciones Rurales Argentinas).
Un informe del Observatorio de la Cadena Láctea Argentina (OCLA) marcó que en dólares oficiales el precio de la leche tuvo un descenso de 13% respecto de agosto de 2019. Para agosto de este año cotizaba en 26 centavos de dólares, por debajo de los 30 centavos del año anterior. Era la leche más barata entre los países productores.
Pero según la dirigente y productora de leche en Carlos Casares, si se toma como referencia el dólar oficial (con los impuestos incluidos) el productor está cobrando en realidad entre 13 y 14 centavos de dólar por litro. Y si la referencia de comparación es el dólar blue, el valor de la leche en dólares baja a 12 centavos por litro.
Todo esto, cuando históricamente el valor promedio de la leche pagada a los tamberos osciló entre 25/30 centavos de la divisa norteamericana, que además es el valor que cobran de piso los tamberos en países vecinos y competidores.
En medio de la crisis cambiaria, además de reducirse el valor del litro de leche en dólares se está dando otra cuestión que afecta los costos: la suba continua de los granos y particularmente de la soja, que es uno de los ingredientes de la dieta de las vacas.
La soja disponible vale cerca de 23.000 pesos la tonelada, lo que es igual a 23 pesos por kilo. Su valor entonces supera en 5 pesos (25% más) al valor del litro de leche, que sigue estancado en torno a 18 a 19 pesos desde hace varios meses.
El panorama para los tamberos se está complicando. Estamos en primavera, cuando se produce más leche y esto complica más la posibilidad de mejora en los precios. Por eso el sector está pidiendo medidas al Gobierno.
Dice Passerini que “falta una leche de referencia, transparencia en la cadena, un mecanismo de gestión del análisis de la leche y, lo más importante, un mecanismo de fijación del precio”.
Esto se lo pidió ya la santafesina CARSFE, entidad adherida a CRA, al director nacional de Lechería, Arturo Videla. Según Passerini van a insistir desde CRA para que se arranque con la definición de esas cuestiones.