El presidente Mauricio Macri y la gobernadora María Eugenia Vidal estuvieron este jueves en Trenque Lauquen, una localidad del oeste bonaerense donde hace pocas semanas los productores realizaron una de sus primeras protestas contra el gobierno de Cambiemos, reclamando una mejora de los precios de la leche frente a una importante úsina láctea.
Hasta donde se sabe, ni Macri ni Vidal hablaron del tema en una reunión que mantuvieron en Trenque Lauquen con dirigentes de diferentes entidades del sector agrícola, incluidos los gremialistas de la Mesa de Enlace. En la llamada Mesa de Competitividad de cultivos Extensivos se habló de varios temas, pero de no de lechería, actividad que viene en crisis en gran medida por las decisiones económicas oficiales y por la falta de respuestas de los funcionarios.
Pero, además, pocos horas antes se había producido un encuentro entre los referentes del sector lácteos y los funcionarios de Agroindustria, encabezados por el secretario Luis Miguel Etchevehere. De allí también los representantes de los productores lecheros se fueron con las manos vacías. En un comunicado, la propia Mesa de Enlace expresó su desilusión por la falta de respuestas a los reclamos de una necesaria recomposición de la renta en los tambos que pueda poner freno a los cierres constantes de establecimientos y la venta de hacienda lechera para carne.
Esa necesidad volvió a quedar en evidencia al conocerse más cifras sobre la realidad del sector. El último dato sobre el costo promedio de rpoductor un litro de leche, publicado por el Observatorio de la Cadena Láctea (OCLA), es de 9,34 pesos, cuando el precio promedio que recibieron los tamberos esas semanas superó por poco los 8 pesos por litro.
La cifra oficial que mide la capacidad de pago promedio de la industria láctea a los productores no pinta mejor, porque se ubica e torno a 7,50 pesos por litro. Este dato da cuenta de que también ese eslabón está en crisis.
Al respecto, la productora Andrea Passerini, referente en el tema por Carbap, dijo que “mientras el precio de la leche cayó de 32 centavos de dólar por litro a 20 centavos (debido a la devaluación), los costos se fueron a las nubes”.
Passerini enumeró que gasoil, alimento balanceado y dólar aumentaron entre 85 y 100% en lo que va del año, y a esto hay que sumar el alto costo financiero. “Los bancos oficiales aumentaron las tasas y el descuento de cheques es imposible, en algunos casos llega al 100%”, indicó. Este análisis de costos corresponde a datos publicados en el sitio Dairy Lando que conduce el analista Marcos Snyder.
Passerini agregó que “no hay herramientas que permitan seguir” a los tamberos luego de una decena de meses de franca pérdida. Explicó la dirigente que más allá del desfasaje creciente entre costos y precios “no hay forma de financiar la crisis”.
Por supuesto, en este contexto, la referente de Carbap se quejó del silencio de radio de los rincipales referentes del gobierno. Dijo que la historia “va a juzgar a esta gestión por lejos como la peor, por más que nos hayan sacado los Roe,. Con la mega devaluación nos pedían un poco de paciencia para que mejoraran los precios vía exportación. Pero luego pusieron retenciones y bajaron reintegros, es perverso”, recordó.
“No hay política lechera, te corren el arco a cada rato y te mienten alevosamente”, resumió Passerini.