En los últimos años proliferaron las marcas y tipos de cerveza de la mano de la difusión de la comida rápida y la proliferación de bares específicos por toda la Argentina. La bebida cuenta con una enorme aceptación entre los jóvenes, quienes de todos modos conocen poco sobre el primer eslabón de esa cadena productiva.
Eso tratamos de contar en la nota que hicimos con Francisco Berisso, gerente de producción de la empresa EDP, que produce cebada en la localidad bonaerense de Bolívar, donde logra rindes muy altos en los lotes con mejores condiciones.
Berisso contó que comenzaron a sembrar el cereal que sirve de materia prima para la cerveza cuando, en la gestión de Cristina Fernández, el secretario de Comercio Interior Guillermo Moreno intervino el mercado del trigo y generó una depresión enorme del precio y una gran transferencia de recursos desde los productores a industrias y exportadores. Como el trigo era muy mal negocio, muchos productores bonaerenses miraron hacia la cebada, otro cultivo de invierno.
Contó el productor que con el tiempo fueron ganando experiencia y superando problemas, a punto que hoy obtienen muy buenos rindes y aprovechan las ventajas de la cebada en las rotaciones, en la combinación con otros cultivos de veranos, como el maíz tardío o la soja de segunda, aunque aclara Berisso que la cebada tiene buenos resultados económicos en sí mismo, más allá de la combinación con los otros mencionados.
Escuchá la entrevista con Francisco Berisso:
“Comenzamos a hacer la cebada en ambientes con problemas de salinidad, donde no podíamos alcanzar picos de rentabilidad en trigo, y luego con la intervención del trigo en la época de Guillermo Moreno. El doble cultivo en el oeste bonaerense funciona muy bien y en los últimos años hubo nuevas incorporaciones de variedades que nos permiten lograr el mismo o mayor rinde que con el trigo”, destacó el productor.
Berisso (en la foto el de la derecha, junto a sus socios y familiares) explicó que para hacer cebada cervecera es muy importante definir una correcta estrategia productiva y un paquete tecnológico adecuado. En la última campaña, pese a que el clima fue un poco seco, la cebada aprovechó muy bien el agua disponible en el suelo lo que les permitió alcanzar un ronde promedio de 5.000 kilos, con picos de 6.300, cuando el promedio nacional ronda los 3.000 kilos.
Para llegar a esto además de mejorar en los aspectos productivos, tuvieron que superar “prejuicios” ya que “habíamos tenido malas experiencias, siempre hay un tema por esa desconfianza entre productor y malterias”, relató.
“Pero fuimos más allá para no quedarnos en la queja y ver qué calidad necesitaba la industria, en cuanto a proteína y calibre, y nos propusimos ajustar ese paquete tecnológico. Hoy estamos muy conformes”, contó Berisso.
El productor explicó que es muy importante conocer qué se está produciendo. Por eso una semana antes de que entre la cosechadora toman muestras del cultivo, la desgranan y estudian la calidad, para evitar conflictos comerciales y poder defender mejor el precio de venta de la cosecha.
“El que no hace esa medición es porque no quiere. Los productores tenemos la obligación de saber qué estamos vendiendo para defendernos”, sostuvo Berisso.
Con respecto a las ventajas productivas que aporta la cebada, el productor indicó: “Nos permite liberar el lote una semana antes que el trigo y tiene eso abre dos alternativas importantes. Una es que en la fecha de cosecha de cebada, a fines de noviembre e inicio de diciembre, uno gana entre 40/50 kilos de soja por adelanto de siembra. Pero además como en la empresa tenemos un feedlot usamos mucho maíz y la cebada nos da también la alternativa de hacer maíz de segunda”.
Excelente, es para retomar y darle seguimiento al cultivo de cebada en nuestra zona. Vivo en Tucuman. Muchas gracias