¿Realmente es más sano para la salud consumir productos orgánicos? ¿Nos protegen más desde lo nutricional? Se lo preguntamos a Carolina Ramos, licenciada en Nutrición y profesora universitaria (MP 2181), quien explicó que para ella y muchos otros profesionales lo principal es mejorar el menú antes que ver cómo se producen los alimentos.
“El consumo de frutas y verduras en la población puede prevenir enfermedades, pero es vital aumentar los cuidados de lavado y sanidad de las mismas, más en tiempos de coronavirus”, explicó.
“Hay que aumentar la ingesta de frutas y verduras”, enfatizó la nutricionista, ya que “es muy poco lo que se consume. Hay desconocimiento sobre muchas de ellas, porque las familias no acostumbran a comerlas. A grandes rasgos, sólo se consume lechuga, tomate, papa y en menor medida, zanahoria”, advirtió Ramos en diálogo con Bichos de Campo.
La especialista remarcó que lo primero que le consulta a un paciente es si come frutas y verduras. “Luego pido que amplíen el abanico y que miren los colores, porque según los colores, más fibras, antioxidantes, vitaminas y minerales van a incorporar. Después, y si el paciente lo plantea y tiene acceso a comprar alimentos agroecológicos y orgánicos, bienvenido sea”, describe.
Al mismo tiempo, Ramos advierte que “hay toda una controversia con este tipo de alimentos, porque si lo analizamos desde lo bioquímico, será una opinión, pero si lo mirás desde lo alimentario, casi todos estamos a favor de que ese alimento no tenga pesticidas”.
Sin embargo, Ramos explicó que “hay que tener en cuenta que cualquier alimento puede desarrollar un microorganismo u hongo, y eso puede terminar siendo peor para la salud de quienes lo consuman, independientemente del proceso de producción que haya recibido”.
Desde el punto de vista nutricional, para Ramos “no hay grandes diferencias entre un tipo de verdura producida de modo convencional que de modo orgánico, porque eso corresponde a la química individual de cada alimento”.
“Lo que sí hay que tener en cuenta para quienes consumen productos frescos agroecológicos u orgánicos, es que la fruta y verdura tienen un tiempo de durabilidad más corta, y, por ende, tienen un envejecimiento más prematuro. Hay que prestar atención a eso porque se altera el valor nutricional del mismo”, aclaró la profesional.
Ramos ve con buenos ojos esta movida de producción de alimentos, porque se cuida al medio ambiente. “Creo que debemos ser conscientes de que, ya sea como consumidores o como productores elaboradores de alimentos, algo estamos haciendo mal y esto debe cambiar”.