El Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) dio a conocer recientemente que la comercialización de vinos en el mercado interno aumentó 9,9% durante enero de 2025. En el informe aseguran que fueron despachados a la red comercial unos 55.101.600 litros, lo que supone un envío de 4.967.000 litros más que en el mismo mes del año anterior.
¿Será que estamos en la antesala de un cambio de tendencia y se volverá a consumir más vino? Aunque se trata de una buena cifra, todavía es muy prematuro asegurar que repunta el consumo en Argentina. Sobre todo si se toman en cuenta las estadísticas del 2024, donde las ventas en el mercado interno cerraron con una disminución del 1,2%. El consumo de vino sigue muy deprimido.
En el caso de lo tipos de vinos, el INV detalla que fueron los tintos los más consumidos y representan el 75,2% del total de las variedades elegidas. Dicho incremento significa una suba del 20,1%. Lo contrario sucedió con los vinos blancos cuyo consumo cayó un 12,7% y apenas alcanzan el 24,7% de participación en los mercados.
En sentido general durante el último año, y tomando como indicador el tipo de vino, las ventas de la bebida sin mención varietal crecieron un 7,1%. Mientras que las de varietales aumentaron un 19,9%. Muy distinto fue el panorama para los espumosos que ocupan el 2,5% del consumo total y experimentaron una disminución del 1,9%.
Según el tipo de envase, el informe registró un incremento en todas la presentaciones que van a la góndola de la red comercial. Por ejemplo, la botella que representa el 60% del total del vino fraccionado para la comercialización, registró un aumento del 12,9%, mientras que el tetra brik, tuvo un incrementó del 3,8%. Por su parte la damajuana experimentó una suba del 11,3% y el vino en lata -que apenas tiene una producción del 0,2%- aumentó 45,9%. Pero la gran revelación fue el bag in box que trepó a 296,6%, por el número de demanda.
Si bien estos datos de INV solo contemplan el primer tramo del año 2025, otros organismos como el Instituto de Estudios Económicos sobre la Realidad Argentina y Latinoamericana (IERAL) de la Fundación Mediterránea, estima que para este año habrá una recuperación del mercado interno, asociada a un mayor poder de compra por parte de la población, pero dependerá de que no aumenten demasiado los precios.
Sin embargo desde el mismo organismo aseguran que el mercado externo estaría complicado, marcado por una fuerte caída en el consumo mundial de vino, sumado a un dólar rezagado frente a la inflación, que resta competitividad a las bodegas argentinas. Estas proyecciones van a tono con los datos de exportaciones de enero, del INV que registran una caída del 10% en las ventas al exterior.