Los dos caras de la Federación Agraria Argentina (FAA) quedaron el descubierto este jueves, tras la protesta que varias organizaciones de pequeños y medianos productores llevaron a cabo frente al edificio del Ministerio de Agroindustria en la ciudad de Buenos Aires. Una de las caras, la que ahora conduce la centenaria entidad, eligió estar del lado de afuera, reclamando un giro en la política agropecuaria nacional. La otra cara permanece dentro del edificio y del gobierno de Cambiemos. Ha sido parte de algunas reformas discutidas, como la próxima eliminación del Monotributo Social Agropecuario.
“Los agricultores familiares somos una mayoría que el gobierno hoy se niega a reconocer, cuando sienta a un puñado de CEOS a una mesa a definir sus políticas”, se quejó desde afuera del Ministerio el actual presidente de la FAA, Omar Príncipe. Dentro de Agroindustria, mientras tanto, convive con esos “CEOS” un ex vicepresidente de la entidad, Julio Currás, quien junto a Guillermo Giannasi (otro histórico dirigente de la Federación Agraria) coordinan la política oficial hacia los pequeños productores, bajo la órbita de Santiago Hardie, el secretario de Coordinación y Agricultura Familiar.
Guste o no la comparación, hoy buena parte de la dirigencia de Federación Agraria está dividida entre esas dos caras: una que todavía mantiene un apoyo crítico al Gobierno de Cambiemos y otra que toma distancia de esta gestión y no duda incluso en marchar con otras organizaciones de pequeños productores claramente ligadas a la gestión kirchnerista, como el Movimiento Evita del ex secretario del área, Emilio Pérsico.
Ver Julio Currás: “En el RENAF hemos encontrado personas que ni siquiera eran productores”
Como sea, la conducción orgánica de Federación Agraria decidió marchar este jueves junto a más de veinte organizaciones de la agricultura familiar hasta las puertas del Ministerio de Agroindustria. Reclamó allí “medidas urgentes, como la continuidad del Monotributo Social Agropecuario, la reglamentación de la Ley de Agricultura Familiar, tarifas y financiamiento diferenciado” para los más chicos del campo.
¡No nos para nadie, ni la lluvia! AHORA en el Ministerio de Agroindustria reclamamos derechos, salud y jubilación para todos los #TrabajadoresDeLaTierra. ¡Monotributo Social Agropecuario YA! pic.twitter.com/m18vSdgsY3
— Unión de Trabajadorxs de la Tierra (@uttnacional) July 26, 2018
La marcha comenzó en Parque Lezama y, bajo la lluvia, terminó frente a la sede de la cartera que conduce Luis Miguel Etchevehere, un ex presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA). Este es un segundo quiebre interno dentro de la agrupación que nació con el Grito de Alcorta de 1912: mientras unos apuestan a profundizar lazos con las entidades de la Mesa de Enlace, los dirigidos por Príncipe prefieren moverse con autonomía y se muestran críticos ante la pasividad de los reclamos de las gremiales agropecuarias.
El documento consensuado por las organizaciones que convocaron al acto pide, entre muchos otros puntos, respetar el ancestral derecho al uso propio de las semillas. También en este aspecto la Federación Agraria ha tomado distancia del resto del arco gremial agropecuario, al presentar su propio proyecto para reformar la Ley de Semillas que promueve el gobierno.
Ver Santiago Hardie: “Agroindustria gastaba $ 30 millones al mes en el Monotributo Social Agropecuario”
Sobre las escalinatas del Ministerio, el propio Príncipe cerró un acto de notable colorido opositor al macrismo. “Venimos a pedir que el Ministerio de Agroindustria atienda a las organizaciones del sector en un ámbito de diálogo, pero que tiene que dar resultados”, indicó el dirigente, que reclamó porque “a los productores de cerdo, los tamberos, los de las economías regionales, que se están fundiendo y ya no pueden poner en marcha una bomba para regar o un tractor, el gobierno nacional nos dice que somos ineficientes y nos tenemos que reconvertir”.
“Mientras otros gobiernos protegen la mano de obra y el valor agregado en sus países, nosotros aquí tenemos las recetas del libre mercado, como si fuese la ley de la selva en la que el más grande se come al más chico, y nosotros somos los más chicos”, describió Príncipe, quien también indicó que “si el Estado está ausente los pequeños y medianos productores, campesinos e indígenas, nos vemos perjudicados por la concentración económica y la importación de alimentos que nos saca de la cancha”.
“Hay que promover la exportación, pero también apostar a tener un mercado interno fuerte, que es para que producimos alimentos la mayoría de los productores”, añadió el directivo actual de FAA, “No es cuestión solamente de agrandar la torta, sino de distribuir de un modo más equitativo”, agregó, replicando recientes declaraciones de Daniel Pelegrina, su par de Sociedad Rural.
#AgriculturaFamiliar #TierraTechoTrabajo
Ahora con las organizaciones de los pequeños productores de la agricultura familiar, campesina e indígena frente al Ministerio de Agroindustria para exigir el cese del vaciamiento al sector. pic.twitter.com/PImOntVXab
— UTEP (@UTEPoficial) July 26, 2018
Además de esta cara de la Federación Agrariam convocaron a la protesta la Asamblea Campesina Indígena del Norte Argentino; la Agrupación Grito de Alcorta; la Asociación de Mujeres Rurales Argentinas Federales; ATE Junta Interna Agroindustria; la Asociación de Medieros y Afines; la Federación Nacional Campesina; el Frente Agrario Evita; el Frente Agropecuario Regional Campesino; la Fundación para el Desarrollo en Justicia y Paz; el Instituto de Cultura Popular; el Movimiento Nacional Campesino Indígena-Vía Campesina; el Movimiento Campesino de Santiago del Estero; el Movimiento de Pequeños Productores de Santa Fe; el Movimiento de Trabajadores Excluidos Rama Rural; la Organización de Naciones y Pueblos Indígenas en Argentina; la Red Agroforestal Chaco Argentino; la Red Entrerriana de Permacultura; la Unión Campesina de Varela; la Unión de Familias Organizadas- Cuña Boscosa y Bajos Meridionales; y la Unión Trabajadores de la Tierra.