No son tiempos fáciles, ni en lo económico ni en lo político, y cuando las papas queman, solemos recaer en echar culpas en el otro sin pensar en buscar soluciones que beneficien a ambas partes. El equilibrio parece no existir en un país de contrastes tan fuertes como Argentina.
Pero a veces aparecen intentos de mostrar lo contrario. El Grupo de Líderes Empresariales de Argentina (Lide) debatió esta semana esta cuestión de la integración y aseguró en su noveno Forum Nacional de Agronegocios que todavía es posible construir un “nosotros”.
El evento tuvo formato de webinar y estuvo encabezado por Gustavo Grobocopatel y Laura Loizeau, presidente y vicepresidente de Lide Agronegocios. Oficiaron de moderadores en un debate que se dio entre Walter Martín, Director de Abastecimiento Local y Producción de la Secretaría de Agricultura Familiar, Campesina e Indígena del Ministerio de Agricultura; José Martins, presidente de la Bolsa de Cereales de Buenos Aires; Carlos Achetoni, presidente de la Federación Agraria; y Fabio Quetglas, diputado nacional de la provincia de Buenos Aires por la Unión Cívica Radical (UCR).
Grobocopatel sostuvo que no creía que existiera un enfrentamiento entre la sociedad y los empresarios. “Más bien pienso que la sociedad está decepcionada, porque cree que los empresarios somos parte de la solución y no estamos haciendo lo que nos corresponde”, dijo.
“Tenemos la posibilidad desde los agronegocios de ser parte de la solución, y pasa por la creación de riqueza, que es posible porque hay sinergia y se pueden crear relaciones ganar-ganar. Debemos transformar el miedo, la incertidumbre y la confusión en esperanza”, relató el presidente de Lide Agronegocios.
Rodolfo de Felipe, Presidente de Lide Argentina, aseguró que el mundo cambió su paradigma y que se revolucionaron las formas de producir. “En Argentina, la economía verde juega un papel esencial en el desafío de orientar los esquemas de producción y consumo hacia modelos más sustentables, inclusivos, y comprometidos con el ambiente, que sean capaces de responder a las demandas actuales, muchas veces apremiantes”.
De Felipe expresó que es necesario “un desarrollo con equidad que equilibre las inversiones, el empleo y el uso consciente de los recursos, con un compromiso social ineludible. Y de allí el nombre de nuestro encuentro, quiénes y cómo lo hacemos, quiénes conformamos este renovado ‘nosotros’”.
Walter Martín explicó el trabajo que están llevando adelante en la localidad bonaerense de Daireaux para generar nuevos empleos, dado que muchas veces no alcanzan para todos los que lo necesitan.
Martín diagnosticó que “el ámbito público se encuentra colapsado en la generación de nuevos puestos de trabajo, y que aunque la producción agropecuaria tradicional ocupa mucha gente, ya no genera nuevos puestos debido a la mecanización, entre otros factores, y la producción industrial en el interior crece muy lentamente”.
Ante esta situación, declaró que entre las estrategias que llevan adelante en la secretaría se encuentran “el apoyo a la creación de industrias, al autoempleo, al fomento a la empleabilidad y a la generación de nuevas empresas de producción asociativa (Nepas), las cuales transforman a desocupados y subocupados en productores que generan el alimento necesario para el abastecimiento local”, y aseguró que “en el período 2016-2019 creamos 126 puestos de trabajo, mientras que en el ámbito privado, ese mismo indicador había disminuido un 6%”.
A su turno, Martins destacó la formación del Consejo Agroindustrial Argentino (CAA), compuesto por más de 50 entidades que buscan dinamizar el ingreso de divisas, crear empleos y generar arraigo en el interior. “Hemos sabido dejar ciertas tensiones a un costado y trabajamos en un proyecto abandonando los espacios de poder, los egos y tensiones que vienen a derruir intentos de unidad en nuestra cadena”, recalcó.
El presidente de la BCBA declaró que en los últimos 5 meses construyeron una hoja de ruta y que pudieron sentarse con el presidente, la vicepresidenta, ministros del Poder Ejecutivo, gobernadores y legisladores oficialistas y opositores. “Si queremos construir políticas a largo plazo hay que sentarse con todos”, dijo. Pero para lograr las metas propuestas, Martins pidió que exista “un marco macroeconómico estable, una reducción de la presión fiscal, ciertos incentivos a la inversión para la creación de infraestructura, y trabajar en educación para generar una corriente contra-migratoria, es decir el regreso de las personas a sus lugares de origen”.
El presidente de Federación Agraria manifestó que si bien desde la entidad federada mantienen una importante integración con la Secretaría de Agricultura Familiar y el Consejo Agroindustrial, “somos propulsores, impulsores y defensores de las políticas públicas diferenciadas para que haya arraigo y desarrollo, y evitar que emigren cinco mil productores por año como sucede hasta ahora”.
Achetoni expresó que “en el Consejo Agroindustrial ponemos nuestra mirada, aunque nos gustaría tener más espacio en los equipos técnicos, porque defendemos a sectores que suelen quedar marginados en una cadena tan potente”. También pidió que no se vea a la agricultura familiar “como un sinónimo de pobreza, de marginalidad o clientelismo político, sino que se la vea como una potencialidad, con horizontes de progreso”.
El diputado Quetglas señaló los modelos de trabajo propuestos por Walter Martín y Martins, y dijo que “estos dos programas pueden ser súper exitosos, pero no lo van a ser mañana, ni dentro de un mes, sino dentro de 2, 3 ó 4 años”, y expresó que aunque es necesario hablar con la política, “en general en Argentina la política es el problema”.
De todos modos, Quetglas reconoció que es muy importante hablar con la política y dijo que hay que entender que “si uno subsidia los servicios públicos urbanos y castiga fiscalmente a la producción del interior, lo racional es que la gente se mueva del campo a la ciudad”, razón por la cual manifestó que “se necesita un programa específico de gestión de ciudades para el país”.