Darío Colombatto es profesor de bovinos de carne en la Facultad de Agronomía de UBA (Fauba), investigador del Conicet y además conoce bien el territorio porque asesora establecimientos, tanto en Argentina como en Uruguay. Lo llamamos para preguntarle qué le parecía que podría cambiar después de la gran pandemia planetaria.
El especialista comentó a Bichos de Campo que tuvo que salir hace unos días para ver el diseño de unos corrales de feedlot en Entre Ríos y notó que la pandemia por el coronavirus ya había cambiado distintos hábitos en el campo, que piensa que van a quedarse un tiempo. “Primero el mate, cada uno con el suyo, como en Uruguay. El trabajo en la manga, con dos personas nomás y bien separadas. Desapareció ese cuchicheo en la oreja o los chistes en voz baja. Y las recorridas de a tres personas, como máximo, en una camioneta, con la ventanilla abierta y hablando hacia delante, sin hacer mucho contacto visual”, describió.
Aquí la charla virtual completa con Darío Colombatto:
Pero de cara a la marcha del negocio, el experto procuró aclarar a futuro los integrantes de la cadena ganadera “debemos estar muy preparados para enfrentar aquellas noticias que surgieron acerca de que el consumo animal tiene una correlación directa con el coronavirus. Tendremos que salir a demostrar que el alimento sano y cuidado no tiene nada que ver con esto”, señaló.
De este modo, Colombatto no relativizó el daño que al sector le provocan declaraciones como la de la ex modelo y conductora de TV Nicole Neumann, quien días atrás sostuvo muy suelta de cuerpo que “si no comiéramos animales, no habría pandemia”. Según el docente e investigador, a futuro “vamos a tener que generar una defensa, a tener que demostrar que el consumo de carnes certificadas en su tratamiento e inocuidad no tiene nada que ver con eventos como estos del coronavirus”.
Darío aceptó que luego de esta pandemia el ojo sobre la forma de producir los alimentos estará mucho más atento que antes. “Por eso tratamos de aumentar la eficiencia en la forma de producir”, dijo en referencia a la contaminación que las vacas emiten mediante la emisión de metano.
“Claro que hay un estrato de ganaderos que tienen la vaca como caja de ahorro (menor eficiencia productiva y mayor contaminación)”, haciendo referencia a los tenedores de hacienda como resguardo de capital, que por lo tanto son poco afectos a establecer planes de mejora de la producción, porque no son productores sino básicamente ahorristas. “No les puedo decir nada a ellos, si el banco les robó la plata años atrás. Pero sí debo diferenciarme de ellos. Está claro que para el tema los gases de efecto invernadero no serán un aliado mío”, lamentó.