Los diputados provinciales por el PRO de Misiones, Miguel Núñez y Horacio Loreiro, impulsan desde la semana pasada una denuncia pidiendo a la justicia federal de Comodoro Py una investigación que determine si el gobierno de la provincia cometió algún delito al comprar a la empresa privada Agro Sustentable SA grandes cantidades de un bioinsumo que no demostró tener los efectos herbicidas como para sustituir al glifosato, el pretendido objetivo de las autoridades.
La empresa Agro Sustentable SA se instaló en abril de 2023 en el parque industrial de Posadas y a partir de allí comenzó a vender al gobierno local un supuesto producto llamado BioHerb, del cual luego el Senasa informó que no existía ningún registro. Los diputados del PRO sospechan que todo se trató de una maniobra para desviar fondos públicos, incluso partidas del Fondo Especial del Tabaco (FET) giradas desde la Nación.
Es lo que declaró al programa Colonia Agropecuaria el diputado Nuñez, que en los próximos días ratificará la denuncia iniciada el martes de la semana pasada.
-¿En qué consiste la denuncia?
-La denuncia consiste en que en nuestra provincia se trató de prohibir el glifosato y nos vendían un producto alternativo que hoy sabemos que no funciona, que es una falsedad total, que no tiene nada de herbicida, que es un insecticida, que nos mintieron, que utilizaron fondos que no corresponden para hacer semejante inversión, utilizaron el Ministerio del Agro, al de Salud, al de Ecología, para certificar cosas que no correspondían. Un verdadero escándalo.
-Usted también preguntó en el Senasa si este herbicida biológico que iba a reemplazar al glifosato estaba bien registrado y resultó que no.
-Realmente el Senasa me dio un comunicado contundente donde especifica bien que es un insecticida, que no tiene nada que ver con lo que ellos plantearon en los rótulos para la distribución, para la venta, porque esta empresa le vendió a la provincia, Agro Sustentable cobró por estos productos. Aparte de que falsificaron el sello del Senasa también. Esto es gravísimo. No tenían ninguna autorización para poner el sello y en su comienzo lo pusieron. En los paquetes de este supuesto bioherbicida iba el sello del Senasa como avalando que estaba registrado y el Senasa finalmente desmintió esto. Esto ya es una cuestión claramente violatoria de las reglas vigentes.
-¿Y usted está seguro que la Provincia pagó por ese bioherbicida y que lo distribuyó entre los productores?
-Sí. Hay documentación donde se especifican montos y todo. No tenemos todo, por eso se pidió la intervención a la justicia federal para que nos diga con exactitud cuántos millones. Lo que sí sabemos es que un pago fue de 511 millones de pesos. Es mucha plata. Para los productores de Misiones, que son pequeños productores, la mayoría con lotes chiquitos, eso suena fuera de lugar directamente. Para algo que nos sirve. Para algo que le iban a dar un resultado económico, sí, pero no para esta estafa.
-¿Y se sabe que no sirve?
-Sí, se sabe. Se sabe. Los mismos productores lo probaron y no tienen ningún resultado positivo. Así que esa es la mejor prueba que tenemos. Aparte desde Senasa también, vuelvo a repetir, nos dieron el informe que (esa sustancia) no es para cumplir esa función.
-¿Y por qué le parece que el gobierno hizo esto? Porque también puede haber sido estafado el gobierno de Misiones, imaginemos. En su buena fe compró un producto que finalmente no servía…
-Yo no creo que haya sido una estafa porque el gobierno está compuesto por muchísimos técnicos y personas que están al tanto de todo. Para mí que hubo una complicidad entre esta firma y parte del gobierno. No voy a decir todo, no lo voy a incluir a todos. Si ellos fueron estafados, tendrían que haber salido a denunciar ellos esta situación. Y no lo hicieron. Siguen en la postura de que están en el camino correcto. Ahora, por lo que sabemos, a este bioherbicida lo están tratando de sacar de circulación, pero está disperso por todas las chacras de la provincia. Porque ya lo compraron, lo pagaron y lo repartieron.
-Está así dando vueltas un producto que no se sabe si es inocuo, si es peligroso, si es inofensivo. Finalmente no es un biolucida. Me asombra que la Provincia haya llegado tan lejos… No tiene explicación desde lo técnico, desde lo agropecuario.
-Claro, porque en lugar de técnico y agropecuario pasó a ser un negocio para una empresa. Yo lo denomino así. Se pasó a tratar de que sea una alternativa (al glifosato) a que sea un negocio. Está a simple vista esto.
-¿Hay lazos entre esa empresa y gente importante de la política en Misiones?¿Usted le ha pedido a la justicia que investigue eso?
-Sí. Le pedimos que investigue todo, que nos dé un informe detallado de quiénes son los responsables de todo esto. Porque hay que ponerle nombre, que den la cara y que digan por qué sucedió.
-¿Por qué hizo la denuncia en Comodoro Py, en la justicia federal? ¿No confía en la justicia provincial?
-Lógico. Acá en la justicia en la provincia de Misiones está muy cercana al gobierno que nos está gobernando hace muchísimos años. Realmente yo no podría haber hecho acá esta denuncia, porque iba a quedar en la nada. Iba a ser yo después el perjudicado. Así de sencillo. Iba a ser yo el malo de la película si lo hacía acá, porque se tergiversa todo. Nosotros estamos realmente en una situación, la producción misionera, a merced de las decisiones políticas de esta gente.
-El gobierno argumenta que Misiones es una provincia muy biodiversa y hay que preservar eso y entonces el glifosato es peligroso
-El sistema productivo de Misiones no se puede dar el lujo de no tener con qué limpiar sus tierras. Es una cuestión lógica. Hay gente que quiere producir en nuestra provincia, y la mayoría son gringos que les gusta el trabajo y que quieren salir adelante, pero no pueden. Sin esta herramienta (por el glifosato) no lo van a poder hacer. La provincia ahora dio marcha atrás. Postergó la prohibición del glifosato, pero le dejó atado de manos y pies a los pequeños productores que tienen que pedir autorización para poder seguir utilizando a partir de julio del año que viene. Eso es peor todavía. A uno sí, a vos sí, a vos no, al otro sí, así.
-Pero aparte suena exagerado pedir permiso para usar un producto que está habilitado en todo el resto del país.
-En todo el mundo. En la mayoría de los países del mundo está habilitado y solamente acá en nuestra provincia se lo prohíbe. No tenemos argumentos para estar conformes con esta decisión que tomaron desde la Cámara de Diputados.
-Usted intentó por la vía legislativa tratar de derogar la ley que prohíbe el glifosato y ahora se prorrogó por decreto, pero fracasó rotundamente: la mayor parte de los legisladores votaron en contra de su proyecto y de la derogación de esta ley.
-Sí. Ellos (por el oficialismo) tienen números propios para decir que sí o que no. Mayoría automática.
-Y ahora que se revela que esto puede ser un gran negociado, ¿no hay modo de que reaccionen los legisladores oficialistas y revisen la decisión?
-Es una alternativa. Yo creo que debemos esperar un poco para insistir de nuevo porque los pasos que tenemos que dar tienen que ser muy precisos. No podemos tomar decisiones apresuradas, por eso llegamos hasta acá y debemos esperar que la justicia se expida. Vamos a dejar que actúe un poco la justicia y después vamos a insistir de nuevo.