¿Jugo de pasto para el consumo humano?, así es. El Wheatgrass (pasto de trigo, en inglés) desintoxica el cuerpo de forma natural. Esto fue comprobado por la médica estadounidense, Ann Wigmore. Que en la década del ’60 se cura ella misma un cáncer de colon consumiendo jugo de pasto. Basando el principio de su tratamiento en los beneficios de la clorofila para el cuerpo humano.
En 1930 el premio nobel alemán Hans Fischer, quien había estudiado la sangre y la clorofila, descubrió que la molécula de esta última es igual a la de la hemoglobina, solo cambia el átomo central -hierro por magnesio-. El magnesio protege a la células contra el daño oxidativo provocado por los radicales libres y ayuda en la absorción y el metabolismo de las vitaminas B, vitamina C y E, que son antioxidantes importantes para la protección celular.
Además de las propiedades del magnesio, esta súper bebida alcaniliza la sangre (los alimentos dañinos acidifican), además de tener vitaminas, minerales y 17 aminoácidos esenciales. Entonces, ¿por qué no consumirlo?. Es que no es tan fácil producirlo, hay que tener semilla de calidad, un buen sustrato y saber germinar y cuando cortar. Además de tener una máquina de prensado y en frío. Que separa la celulosa -no digerible por el cuerpo humano-.
Pero ya en el país existen empresas que producen los mantos de wheatgrass y los comercializan, para el público que tiene la máquina de prensado o bien como barritas congeladas listas para consumir.
Aquí la entrevista con Diego Almada, de Luz vida:
Esta empresa está desde el 2006 en el país y son los únicos certificados. “Los animales son sabios, viste que los gatos o perros comen pasto cuando se están intoxicados”, dijo Almada a Bichos de Campo.