“Mi experiencia es sobre todo de un profesional que gestiona, y logra que las cosas sucedan y alcanza los objetivos que se definen como meta. Me defino como un profesional que sabe trabajar en equipo, que el liderazgo surge por el reconocimiento de mis colaboradores, en el saber hacer”. Así se presenta en su muro de Linkedin Oscar Ernesto Solis, quien acaba de ser designado como nuevo agregado especializado en China. Tendrá rango de embajador plenipotenciario y cobrará sueldo diplomático.
Solís, recibido de ingeniero agrónomo en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora y con una maestría en administración de empresas en UCEMA, no reemplazaría al actual agregado agrícola en China, Hernán Aníbal Viola, sino que lo complementaría. Viola, que fue designado en 2016 por el gobierno de Cambiemos, trabaja en la sede de la embajada en Beijing. El Decreto 178/2021 que hoy designa a Solís establece con claridad que éste desempeñará su tarea en el Consulado General y Centro de Promoción de la Argentina en la Ciudad de Shanghái.
Es decir que la Argentina ahora tendría dos agregados agrícolas en su principal mercado para productos alimenticios, en especial la soja y la carne vacuna. Uno en la embajada en Beijing, el otro en el consulado en Shangái.
Esta designación pone de manifiesto el apoyo explícito del ex ministro de Agricultura de 2009, el bonerense Julián Domínguez, para con la actual gestión del formoseño Luis Basterra. Solís pertenecía al grupo político que acompañó a Domínguez en esa cartera nacional entre 2009 y 2012, ocupando la estratégica subsecretaría de Agricultura. Pero además Domínguez le prestó a Basterra al abogado Julio César Vitale, quien se desempeña desde 2019 como subsecretario de Gestión Administrativa y es quien maneja las cuentas en Agricultura.
“Manejo el inglés adecuadamente, me forme en una compañía americana del medio oeste”, comenta Solís sobre si mismo en su página de Linkedin. Donde añade que el sueño de llegar a China desde hace rato ronda por su cabeza: “Como un activo importante debo mencionar estos últimos seis años en contacto casi dos veces por año con el gobierno de la República Popular de China, de los ministros vinculados con el sector agroalimentario, con la Biotecnología, con la Bioenergía, con la Acuicultura, con las Semillas, así como de las autoridades sanitarias chinas”, describe.
Desde la llegada del nuevo gobierno, según se desprende de allí, Solís ya tenía un conchabo en el Ministerio dirigido por Basterra, como asesor.