“En Castelli vamos a juntar a productores, frigoríficos y carniceros y vamos a poner el kilo de asado a 399 pesos (el kilo). Va a bajar casi 50% el precio de la carne porque queremos que la gente coma. Hay que rediseñar toda la cadena cárnica en la Argentina, urgente”.
Así lo indicó hoy el intendente kirchnerista del partido bonaerense de Castelli, Francisco Echarren, para quejarse luego de que está “180 pesos el kilo de carne en pié y casi 800 en el mostrador”.
“Hay que cuidar al productor y a la gente trabajadora y terminar con los intermediarios que encarecen y forman precios. Eso vamos a hacer en Castelli junto a productores, frigoríficos y carnicerías. Todos juntos, por la gente”, aseguró.
180 pesos el kilo de carne en pié y casi 800 en el mostrador
Hay q cuidar al productor y a la gente trabajadora y terminar con los intermediarios q encarecen y forman precios.
Eso vamos a hacer en Castelli junto a productores, Frigorífico y carnicerías.
Todos juntos, por la gente— Francisco Echarren (@EcharrenF) May 23, 2021
El intendente de Castelli no especificó qué implicaría “terminar con los intermediarios que encarecen y forman precios”, pero, si se analizan las medidas recientes instrumentadas por el gobierno nacional, muy probablemente se refiera a eliminar la presencia de matarifes para que la demanda se concentre solamente en los frigoríficos y especialmente en los de mayor escala.
Al introducir diferentes trabas para eliminar a un jugador clave del negocio cárnico, se promueve, indefectiblemente, una mayor concentración de la demanda, la cual contaría con más “poder de fuego” para controlar los precios de compra de la hacienda.
En lugar de identificar el problema inflacionario como una cuestión de orden macroeconómico e intentar solucionarlo de manera estructural –pues no es que los bienes y servicios “estén caros”, sino que es el peso argentino el que vale cada vez menos–, los funcionarios del gobierno de Alberto Fernández optaron por “apretar” a diferentes empresas y sectores para que financien con sus propios recursos los precios mayoristas de los productos básicos.
Pero, mientras que en otros sectores encuentran con facilidad interlocutores con quienes dialogar, no sucede lo mismo con el sector cárnico, que está representado por frigoríficos exportadores, frigoríficos “consumeros” y matarifes de diferentes regiones argentinas.
Para resolver ese molesto problema, en las últimas semanas se instrumentaron diferentes medidas orientadas a diluir la participación de los matarifes en el negocio cárnico. Es decir: los intermediarios a los que hace referencia –sin nombrarlos– el intendente de Castelli.
Para decirlo sin matices: se está proponiendo “borrar del mapa” a un numeroso grupo de empresas con el propósito de concentrar al sector cárnico y poder así negociar con mayor facilidad “acuerdos de precios”. No importa cuánto daño y desempleo cause semejante “cruzada”.
Si bien lo ideal es que en un sector económico esté integrado por múltiples participantes para permitir que los precios brinden las señales necesarias para regular la oferta en función de los requerimientos de la demanda, la mayor parte de los integrantes del gobierno argentino no comulga con esa tesis y cree que el sector privado debe obedecer los designios de los funcionarios públicos. Usted debe producir tanto y vender a tal precio y así.
La última vez que se intentó eso en el sector cárnico las cosas no resultaron del todo bien, dado que en apenas tres años se liquidaron casi 10 millones de cabezas en un proceso de “vacunicidio” sin precedentes.
Pero, quizás razonan en el gobierno, eso no funcionó porque no había intermediarios facultados para “bajar” verticalmente las órdenes provenientes de la “craneoteca” pública. Habrá llegado el momento, entonces, de pasar la guadaña para eliminar a la mayor parte de los participantes del negocio y dejar todo en manos de unos pocos grupos fácilmente reconocibles. Total, si hay algo que sobra en la Argentina son empresas y empleos. Menos mal.
Sería importante que ademas de proliferación de adjetivos y valoraciones subjetivas nos brinden a los lectores de BdC información que permita comprender el fenómeno de la intermediación, para discernir si todo lo que hay es virtuoso. Le pregunté a gugle que es un matarife y el algoritmo me propuso este viejo artículo de P12 que reforzó mi sospecha de que no todos los actores de la cadena cárnica actúan de manera virtuosa, más allá de la estricta ruralidad (dónde no parece que esté la tuerca floja que genera el problema aunque la estén, injustamente, ligando de rebote).
https://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/1-65367-2006-04-09.html
Por otro lado la idea de que la inflación de origina en la emisión fue desmentida por la gestión de Cambiemos 2015/2019 (menos emisión, record de inflación). Por eso el gobierno de cambiemos no pudo renovar.