El dólar maíz tiene un impacto perjudicial directo sobre la producción de bioteanol, ya que ese grano es el principal insumo de las fábricas que aportan la mitad del biocombustible necesario para el corte obligatorio de las naftas. Para tener dimensión, el maíz significa nada menos que el 50% de su costo final de producción
“El daño es doble, primero porque el costo de producción aumentó 20% de la noche a la mañana y segundo porque se rompió el mercado del cereal”, dijo Patrick Adam, de la Cámara de Bioetanol de Maíz.
“En estas condiciones es difícil fijar precios y van a quedar secuelas porque el productor, con todo derecho, después no va a aceptar un valor inferior al que está obteniendo ahora. Esta es una medida que nos complica la producción de bioetanol”, indicó el directivo.
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El costo del bioetanol, según indicó Adam, es de 172,6 pesos por litro, y con esta medida aumentó en 27 pesos el litro.
“Si no se puede aumentar el precio al menos debería haber una compensación para que no nos obliguen a trabajar a pérdida, que es lo que venía pasando antes de esta medida”, señaló.
Además, indicó que la imposición del Impuesto PAIS de 7,5% al ingreso de insumos necesarios para ese proceso, como encimas, levaduras u otros productos, también los afecta negativamente.
Adam se quejó porque los funcionarios no favorecen el desarrollo de estas industrias que sirven para agregar valor a la producción primaria. Sabe que las empresas que fabrican este combustible de origen vegetal no pueden competir contra los monstruos del sector petrolero, pero sí cree que podrían ser parte de la solución en tanto se evitarían importaciones.
“El año pasado la Argentina importó naftas terminadas por 1.000 millones de dólares, que serían 100% sustituibles por etanol. Es más, se importan naftas a precios más caros de los que luego se venden en el mercado interno”, lamentó.