La ola de calor y la falta de lluvias se hicieron sentir en el día de ayer incluso en el predio del INTA Castelar, ubicado en el partido bonaerense de Hurlingham, y donde trabajan los científicos y técnicos del Instituto de Clima y Agua de ese organismo, que son los que miden a nivel global el efecto de este fenómenos climático extremo en todos los campos del país.
Un importante incendio se desató cerca de los límites del terreno de la mayor experimental que tiene el INTA, y que alberga a varios de sus institutos de investigación. Según los vecinos de las inmediaciones, se inició en unos eucaliptos, afectó a varias plantaciones de la zona de los invernáculos aunque por fortuna sin dañar ninguna de las estructuras ni los edificios.
Según informaron fuentes de INTA a Bichos de Campo, las causas del siniestro -que inició alrededor de las 14 horas- responden a las condiciones climáticas extremas, que luego empeoraron por la intensificación del viento. El fuego llegó a esparcirse pero no tuvo contacto con ensayos en desarrollo ni tuvo consecuencias para el personal presente.
Fue necesaria la presencia de seis dotaciones de bomberos de Hurlingham, que estuvieron trabajando en el lugar hasta las 19 de la tarde, hora en que el fuego pudo ser sofocado, y que permanecieron de guardia hasta la madrugada del día de hoy.