Sergio Rafaelli, el actual presidente de CLERA (la Cámara de Legumbres de la República Argentina), describe que la actualidad los los encuentra produciendo en la misma área que el año pasado, ya que diversas razones estancaron la producción. El aumento en las retenciones, la pérdida de los reintegros a la exportación y el alto costo del flete por la lejanía a los puertos conspiran para quelas arvejas, los garbanzos y los porotos empiecen a competir a la altura de otros commodities agrícolas, como la soja y el maíz.
“Somos una economía regional que produce a más de 1.000 kilómetros del puerto en la mayoría de los casos y la caída en el precio internacional ha hecho que en algunos cultivos se trabaje a pérdida. Es el caso del garbanzo, que cayó a menos de 600 dólares la tonelada cuando el costo se eleva a 750 dólares, dependiendo del flete”, destacó Rafaelli. En CLERA recientemente realizaron su clásica jornada anual de actualización técnica, donde debatieron los principales problemas que enfrenta la actividad y las oportunidades que vislumbran a futuro.
Escuchá aquí la entrevista completa con el titular de CLERA:
La Argentina tiene una larga tradición exportadora en porotos. Se venden cerca de 500 mil toneladas al año entre poroto alubia y poroto negro. Pero Rafaelli aclara que el actual estancamiento pasa por los elevados costos de competitividad, por la logística interna sobre todo.
“Egipto pone mercadería en puerto de destino en Europa en 3 a 7 días y nosotros en 40 días. Por eso tenemos que dar algo a cambio, calidad o precio, y hoy no estamos en condiciones” de hacerlo, destacó Rafaelli a Bichos de Campo.
En este marco, el dirigente ve una gran oportunidad en lograr el acuerdo fitosanitario con China, lo que le permitiría a la Argentina ubicar cerca del 25% de lo que exporta hoy de porotos, entre varios granos. “Es la mejor oportunidad que tenemos, pero si la dejamos pasar la vamos a perder”, destacó.
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La negociación sanitaria para podee vender legumbres a China data de 9 años, y según el directivo en algunos momentos dependió de la Argentina. Ahora la pelota está del lado del gigante asiático. “Estamos esperando que se aprueben las plantas exportadoras que la Argentina sugirió y Senasa certificó. Es el mercado más grande que tenemos por delante y si no lo dejamos pasar, lo va a agarrar otro”, se ilusionó Rafaelli.
En estos momentos, el ministro de Agricultura Luis Miguel Etchevehere se encuentra en China.