El 2022 fue un año récord para las exportaciones argentinas, que en su conjunto totalizaron 88 mil millones de dólares. Gran responsable de estas ventas es el sector agropecuario, que representa el 63% de las mismas.
Si bien el complejo sojero es un mascarón de proa de las ventas al exterior, las economías regionales aportan un porcentaje interesante a este total de las ventas, poco menos del 20% y sumando 11.900 millones de dólares en 2022.
Más allá de las frías cifras, las economías regionales son un factor importantísimo en la ruralidad de nuestro país, particularmente en las zonas alejadas de la zona central del país donde predomina la producción de commodities.
Estos casi 12 mil millones de dólares que aportaron estas economías están comprendidos por 30 sectores importantísimos para la actividad de los pueblos en muchas provincias: Arroz, algodón, té, vinos, miel, maní, legumbres, lácteos, azúcar, lana, pesca, cítricos, entre otros.
De acuerdo a un informe económico de la Bolsa de Comercio de Rosario, estas actividades productivas vienen retrocediendo y achicando sus niveles exportadores en los últimos años.
Según informaron desde la entidad, “en los últimos cuatro años, se puede observar una tendencia decreciente de la participación de las economías regionales dentro de las exportaciones totales, pasando del 17,5% en 2020 al 13,1% en términos de valor para 2022, lo que demuestra la existencia de un potencial espacio para el crecimiento. En el mismo sentido, la participación relativa de las economías regionales en las exportaciones agroindustriales decrece levemente para situarse en aproximadamente 20% en términos de valor, unos 5 puntos porcentuales menos que en 2020, lo que significa que no alcanzó el crecimiento del sector agroindustrial”.
Para completar la información, los rosarinos agregaron: “En el período de referencia se puede observar que, mientras que las exportaciones agroindustriales se multiplicaron casi nueve veces y media, las exportaciones de economías regionales lo hicieron por nueve veces, lo que explica la leve disminución en la participación”.
En el listado de estas actividades se puede observar el rol protagónico que adquiere el sector de la pesca, que concentra el 15,7% de la participación en términos de valor, seguida por los lácteos y la cebada, con un 13,6% y 10,4% de participación, respectivamente. Este último sector, además, concentra el 32% del tonelaje de exportación, seguido por el maní que da cuenta del 6,5% en cantidades, mientras que aporta el 8,9% en términos de valor.
De los 28 principales sectores, en 14 de ellos se observa un crecimiento tanto en cantidades como en términos de valor para el año 2022 en comparación con el promedio de los 3 años anteriores, mientras que 7 de 28 registraron caídas en ambos guarismos.
“Analizando en detalles algunos sectores: Arvejas, Huevos y Cebada, presentaron la mejor performance, con las mayores variaciones positivas. En sentido contrario, las mayores variaciones negativas se encontraron en Frutas finas, Frutos secos, Peras y Manzanas”, enumeraron desde la Bolsa de Comercio de Rosario.