El Instituto de Promoción de la Carne Vacuna (IPCVA), en su informe mensual sobre exportaciones, confirmó este jueves el récord en cuanto al volumen de los embarques de ese alimento, ya que se alcanzaron las 897 mil toneladas res con hueso. Significó un incremento de 8,5% con relación al registro alcanzado el año pasado.
Esto fue posible gracias a la creciente demanda de China, hacia donde se envió el año pasado el 75% del total embarcado. Esa tendencia se mantendría durante este año ya que de acuerdo a lo que prevé el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), China aumentaría sus importaciones a 2,8 millones de toneladas lo que significa un crecimiento interanual de 3,5%, pero que llega al 300% en los últimos 5 años.
El récord en el volumen exportado no tuvo su correlato en cuanto al ingreso de divisas, que cayó 12%. La facturación anual fue de 2.700 millones de dólares debido a la caída de los precios en casi todos los mercados.
La explicación es que China pagó un valor promedio en el año de 3.713 dólares lo que implica una caída de 23,5%. En este caso la excusa primera fue la supuesta caída de la demanda por la difusión del coronavirus lo que las estadísticas posteriores desmintieron.
A lo largo del año los importadores de ese país se las ingeniaron para hacer valer su peso en el mercado y bajar los valores. China compra todo y cada vez más pero fija sus condiciones en cuanto a precios.
Donde sí impacto de lleno la pandemia fue en las ventas al resto de los mercados como por caso el europeo donde la carne se consume fuera del hogar. Alemania pagó en promedio 8.900 dólares por la tonelada Hilton lo que significa una caída de 12% mientras que los Países Bajos (Holanda) pagaron 8.700 dólares lo que indica una caída del 25%. Estados Unidos pagó 4.700 dólares por tonelada lo que implicó una disminución del 27%.
En este contexto los exportadores están reclamando mejores condiciones de competitividad para este año que también pinta complejo y por eso presentaron al gobierno un plan de reducción de los derechos de exportación de los cortes con más valor agregado.
Los frigoríficos que venden carne al extranjero están operando con un dólar oficial al que hay que restarle las retenciones lo que encarece la materia prima. Según las estadísticas del IPCVA el precio que paga la industria por kilo de novillo en gancho es de 3,60 dólares mientras que en Brasil ese valor es de 3,11 dólares y en Uruguay de 3,20.