Tal como informó ayer Bichos de Campo, la Secretaría de Comercio Interior y la Secretaría de Agricultura sellaron este jueves un acta acuerdo con la industria láctea que, según la mirada oficial, sirve para “ampliar los volúmenes de producción y abastecimiento en el mercado interno y sumar 32 nuevos productos lácteos al programa Precios Cuidados”.
La contraprestación por colocar esta mayor cantidad de productos a precios populares es la promesa del gobierno nacional de no interferir en las exportaciones del sector, como está ocurriendo en el sector de la carne vacuna.
El Centro de la Industria Lechera Argentina (CIL), la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (APYMEL) y la Junta Intercooperativa de Productores de Leche (JIPL) firmaron ese acuerdo que “busca aumentar la cantidad de bienes producidos por el sector lácteo incluídos en el programa de precios de referencia en góndola”, según dijo un comuncado del Ministerio de Desarrollo Productivo. .
“A través de este acuerdo, se promueve incrementar progresivamente los volúmenes de producción y sumar nuevas marcas y líneas de productos al programa Precios Cuidados que, a partir del 1 de junio, tendrá un impacto significativo en el abastecimiento de lácteos en el mercado doméstico. De esta manera, la canasta se incrementará un 45% y quedará con 97 productos lácteos y un total de 702 ítems”, precisó el documento oficial.
Por supuesto se debe discriminar este aporte del sector privado. El grueso de la oferta que irá a más bajos precios será de leche refrigerada, los populares sachet. Según Comercio Interior, “se robustecen en un 80% las opciones de mercado de leches no refrigeradas. En este segmento se incluye la mayor cantidad de empresas involucradas en el convenio”.
En tanto, la leche en polvo multiplica por 7 la oferta en el programa y los quesos la duplican en todas las variedades: crecen un 148% los de pasta blanda, con una alta participación del segmento PyME y cooperativo.
Otros tres productos lácteos que presentaron un alto nivel de consumo durante el último año y medio, como lo son el dulce de leche, la manteca y la crema, incrementarán su participación en Precios Cuidados un 354%, 203% y 133%, respectivamente, indicó la mirada oficial.
En el primer cuatrimestre crecieron las exportaciones de lácteos, pero también creció la producción
Los privados, en su interpretación de la letra chica, prefieren ver como una victoria que -para recomponer un poco de márgenes en la cadena- se deslistan muchos productos lácteos algo más sofisticados, en los que se podría subir los precios con mayor libertad en los productos que les suelen ofrecer un mejor retorno. También está la promesa del gobierno de que no trabará las exportaciones de lácteos, justo en este momento en que se han incrementado los precios internacionales.
“Es un gran gusto estar firmando este acuerdo con un sector tan importante que tiene empresas grandes, PyMEs, cooperativas, que produce un bien esencial para la alimentación diaria y que está presente en muchas provincias de nuestro país. Queremos potenciar la capacidad productiva que ya tiene el sector y atender las necesidades que tenemos de cuidar el mercado interno para garantizar la mesa de las argentinas y los argentinos”, expresó la secretaria Paula Español.
“Nuestro objetivo es recuperar el consumo de lácteos principalmente en los sectores más vulnerables”, añadió.
Un informe del OCLA (Observatorio de la Cadena Láctea) sobre las ventas al mercado interno en el primer trimestre del año muestra una retracción del consumo de solo 2,2% respecto del mismo período del año anterior. Pero en el rubro de leches refrigeradas el ajuste llegó a casi 16%. Es el rubro que ahora se privilegia en este acuerdo.
Comercio Interior también elogió que en este nuevo pacto “se duplica la cantidad de empresas que van a tener presencia en el programa, con un total de 25 firmas que cuentan con diversas realidades y perfiles productivos”.
“Estas empresas nuclean casi la totalidad de la capacidad de procesamiento de leche cruda a nivel nacional, lo que convierte al acuerdo en una iniciativa fundamental para fomentar la producción y garantizar el abastecimiento interno de productos alimenticios esenciales para el consumo argentino”, se remarcó.
Quien reapareció con la firma de este pacto fue el secretario de Agricultura, Jorge Solmi, quien hasta ahora se ha mantenido en silencio, como el ministor Luis Basterra, respecto del cierre de las exportaciones de carne. En referencia al acuerdo lácteo, dijo que ““este es un trabajo transversal entre los dos ministerios y el sector privado, del que estamos conformes de haber concretado. Nos satisface ver una gran cantidad de empresas y cooperativas del sector comprometidas para llegar a todo el país, haciendo un esfuerzo compartido entre grandes productores, pequeños y el Estado”.
Por su parte, el gerente de CIL, Aníbal Schaler, consideró al acuerdo como “un puntapié inicial y no el final de un proceso, porque hoy estamos iniciando un trabajo en conjunto que se presenta como superador ya que no solo se duplican los volúmenes y se amplía la gama de productos, sino que se incorporan marcas, nuevas empresas y se proyecta una mayor extensión geográfica”.
El presidente de APYMEL, Pablo Villano, definió al convenio como “crucial y novedoso porque es el primero en el que intervienen las cámaras que representan a las pequeñas y medianas empresas, a las cooperativas y a las grandes empresas del sector y eso lo convierte en un acuerdo integral de un peso institucional importante”.