Resulta innegable la influencia del Papa Francisco sobre el ministro de Ambiente, Juan Cabandié, y sus colaboradores más inmediatos, quienes confeccionaron un nuevo plan para impulsar la transición en la Argentina hacia ciudades ambientalmente más sanas, que fomenten la agroecología, el reciclado y la denominada economía circular. Tan evidente es esa influencia que uno de los componentes del nuevo plan se llama “Haciendo lío”.
“Hagan lío, pero también ayuden a arreglar y organizar el lío que hacen. Un lío que nos dé esperanza, que nazca de haber conocido a Jesús”, le propuso Fransisco en julio de 2015 a una multitud de jóvenes que lo escuchó en Paraguay, último tramo de una gira por Latinoamérica.
Claramente embebidos en ese discurso, las autoridades del Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible acaban de dictar la Resolución 200, que roza de cerca al sector agropecuario aunque su foco de atención estará puesto en la construcción de ciudades más vivibles. Uno de los elementos centrales del proyecto será “la implementación del Programa de involucramiento de jóvenes y adolescentes al desarrollo sostenible Haciendo Lío por Nuestra Tierra”. Todo dicho.
En los considerandos de la resolución se explica que “en el contexto global de crecimiento constante de las ciudades y de sus conurbaciones, se observa una mayor incidencia de éstas en los impactos negativos al ambiente a escala planetaria y por ende se requiere contrarrestar esta tendencia mediante la adopción de medidas conducentes a reducir dichos impactos, incluyendo el incremento de la resiliencia y la reducción de la vulnerabilidad”.
“La promoción de patrones sostenibles de consumo y producción, es parte de los requisitos indispensables para alcanzar el desarrollo sostenible”, añade la norma firmada por Juan Cabandié, que no solo se propone convocar a grupos de jóvenes a “hacer lío” para impulsar nuevas conductas sino que en un segundo componente del programa, llamado “Tierra Viva”, apunta a “abordar la promoción de la producción sostenible de alimentos y el fortalecimiento institucional de municipios en materia de agroecología”.
Por eso decíamos que la iniciativa toca de cerca al sector agropecuario.
Hay más vínculos. El plan de Ambiente considera fundamental “iniciar acciones tendientes a desvincular el crecimiento económico del uso de los materiales y la contaminación, por lo cual se promoverá la recuperación de materiales y el aprovechamiento eficiente de los recursos a lo largo de todo el ciclo de vida de los productos”. Este componente de la iniciativa se llama “Re-Hacer”.
Hay un cuarto módulo, que tiene que ver con detectar “nuevos proyectos que brindan soluciones innovadoras y crean oportunidades a partir de la perspectiva ambiental”. Aquí se pretende fortalecer la actividad de emprendedores ligados a la “Reactivación Sostenible”.
Finalmente se propiciará la creación de áreas naturales y el cuidado del arbolado a través de un programa de fortalecimiento de las Reservas Naturales Urbanas o viveros municipales, denominado “Verde Vida”. Y se promoverá “la transición hacia patrones de consumo y producción sostenibles a través de otro programa llamado “Crecer”.
“El presente plan constituye una política de Estado basada en un enfoque integral, guiada por el consenso y la participación de distintos actores de la sociedad. La implementación del Plan involucra el trabajo conjunto de diversos organismos y niveles del Estado nacional, provincial, y municipal, y actores de la sociedad civil que acompañan acciones para la atención de la población destinataria y el logro de los objetivos planteados”, explicó la norma firmada por el ministro Cabandié, que al mismo tiempo derogó el programa ideado por el gobierno de Cambiemos en 2016, y que con mucho menos romanticismo se denominaba Ciudades Sustentables”.
Por ahora hay pocas precisiones, pero la cartera de Ambiente ha comenzado a distribuir en esta misma resolución algunos anexos que establecen cómo las instituciones de gobierno, más los municipios y los emprendedores del sector privado pueden recurrir a apoyo presupuestario desde el gobierno nacional.
“Invítase a los Estados Provinciales, a los municipios, a las Universidades Nacionales y a las organizaciones de la sociedad civil, cooperativas involucradas en temáticas ambientales a efectos de interiorizarse, inscribirse y/o participar del presente plan integral y en particular a los municipios y comunas de todo el país a efectos de realizar todas las acciones necesarias conducentes a la suscripción de los Planes de Acción Territorial Innovadores”, dispone la nueva norma.
Todo dicho: Hagan lío.