La crisis económica argentina se profundiza, todos la sufrimos, pero ya no se escuchan demasiadas voces que explique cómo salir del laberinto. La política, de un lado y del otro, no propone nada. No tiene con qué, porque ninguno resiste el archivo.
De estas cuestiones habló Bichos de Campo una vez más con el analista económico Salvador di Stéfano, a quien le pareció casi ridículo que se haya planteado la posibilidad de pensar en una moneda única en el Mercosur cuando uno de los países líderes, la Argentina, tiene su propia moneda en un proceso de devaluación continuo.
Recompra de deuda: Peor que la sequía climática es la sequía de ideas
“Eso no es viable. Deberíamos tener un tratado para que los indicadores macro confluyan a niveles parecidos a los que tiene Brasil, que cuenta con una inflación de un dígito. Hoy Argentina tiene reservas por 40.000 millones de dólares, inflación de 100%, y gasta más de lo que le ingresa. Mientras que Brasil tiene reservas por 360.000 millones de dólares y una inflación de un dígito. Por lo cual no tiene sentido la propuesta esa, pensar en una moneda común es desafortunado”.
Bien. Despejado este asunto de coyuntura luego de la cumbre de la Celac, pasamos a otro tema. Entonces le preguntamos a Salvador: ¿Cuál es el problema de la economía Argentina?
“La insolvencia. Gasta más de lo que entra, somos insolventes, y esto se resuelve, aumentando los ingresos”.
Escuchá la entrevista:
Di Stéfano explicó que es inviable seguir tomando deuda como vienen haciendo los diferentes gobiernos. “Es como un comercio que resuelva la falta de liquidez tomando deuda, se funde. Lo que le pasa a Argentina es que no está fundida, está refundida”, explicó.
El locuaz economista cree que la receta pasa por achicar el gasto público, pero eso es algo a lo que se resisten los políticos. “Hubo países que superaron crisis similares, como los que salieron de la guerra y armaron fondos anti-cíclicos, acá no. Entonces luego de la pandemia y tres años de seca la conclusión es simple: hay más inflación”.
En este contexto, ¿quedan negocios rentables por hacer en un país desquiciado?
El analista dijo que los negocios de largo plazo, como los ganaderos, no serán buenos porque implican inmovilizar capital por mucho tiempo, con niveles de inflación altos. En cambio el rubro agrícola tendría más chances de tener resultados positivos, porque es de plazos más chicos.
“El costo de oportunidad de dejar el animal comiendo pasto 2 años es de 300% y la agricultura será rentable si no te pega la seca y si tomas los insumos a crédito y en 6 meses recuperás la inversión. Pero si te agarra la seca, cuidado porque vas a tumbar la chata”, adviritó.
Hace poco el ministro de Economía, Sergio Massa, anunció la recompra de bonos de la deuda con dólares, es decir que utilizará justo lo que más le va a faltar a la economía en 2023. Tanto desesperó ese faltante a los funcionarios que para hacerse de esos billetes armaron el Dólar Soja 1 y 2.
Di Stéfano había pronosticado el año pasado que al 31 de diciembre de 2022, en este contexto de escasez, el dólar debería estar en los 400 pesos, pero le erró. “Mi blopper se debe a que para frenar la llegada a ese valor y por llevarme la contra, el gobierno armó el Dólar Soja 1 y 2 y pidió anticipos de retenciones y de ganancias a las grandes empresas. Si no hubiera hecho eso también me hubiera equivocado, pero me habría quedado corto”, explicó risueño.
El especialista remarcó que el dólar es una mercadería más de la economía, que debe aumentar tanto como la inflación que es reflejo de la devaluación del peso. “Hay atraso del tipo de cambio, ni hablar del que tiene el que exporta trigo, soja, maíz, carne y paga derechos de exportación”
En este contexto nos empobrecemos todos, el trabajador y las empresas. “La única forma de frenar eso es con inflación de un digito. Mientras tanto, la Argentina se va secando como una pasa de uva y todos vamos a tener deterioro en la calidad de vida. El problema es la inflación, lo que se requiere es hacer más productivas y competitivas a las empresas”, recomendó Salvador.
Según este mirada, este proceso inflacionario tiene otra consecuencia, la concentración económica y la desaparición de las pymes. “Para escapar a la crisis hay que tener cada vez más escala. El que tenía mil animales tendrá que tener 2.000 y el que hacía 1.000 hectáreas tendrá que hacer más también. Es un sistema que te agota trabajando para cubrir los gastos de estructura”.
Otra manera de decirlo: Esta inflación tan alta hace que “los chicos se mueran y los grandes crezcan”. Por eso di Stéfano consideró que “es una incongruencia cuando escucho a la gente decir que el problema son las retenciones, el principal problema es la inflación y la insolvencia del Estado”.
“Mientras tanto el ministro de Economía en lugar de incentivar las exportaciones recompra con dólares bonos de la deuda. En Argentina los patos le disparan a la escopeta”, cerró.