Cansada de los dedos acusadores sin ningún o con poco fundamento que nada hacen para mejorar la situación, la comunidad que habita y produce en las Islas de Victoria, en Entre Ríos, frente a Rosario, conformó en 2021 su propia organización para trabajar sobre distintas problemáticas desatendidas en esa zona. Por estos días, su problemática volvió a estar en primera plana.
Integrada por productores, puesteros, propietarios de viviendas, trabajadores de turismo y pescadores, la CIAC (Comunidad Islera Asociación Civil) elaboró recientemente su primer plan de prevención para combatir los incendios en las islas del Delta del Paraná, que ya fue presentado a las autoridades provinciales.
“A raíz de los sucesos que comenzaron en 2008 con los primeros incendios de magnitud, que luego se repitieron a partir de 2020, quienes vivimos en las islas comenzamos a recibir una serie de acusaciones y agresiones. Nos juntamos y espontáneamente decidimos que había que formar alguna organización para defendernos. Allí nació CIAC, que ya cuenta con personería jurídica. Integra un abanico bastante grande de gente relacionada con la actividad en las islas”, dijo a Bichos de Campo Leonardo Scarparo, presidente de la organización además de productor isleño y agrónomo.
La CIAC cuenta con distintas comisiones de trabajo como las de ganadería, turismo, apicultura, medio ambiente y pobladores, que ya se encuentran vinculadas a otras instituciones como el INTA y gobiernos municipales.
También comenzó a formar parte del Comité de Ordenamiento Territorial de Victoria y entabló contacto con la Secretaria de Medioambiente local, a través del Plan de Manejo del Fuego. Están interactuando en torno a los focos actuales.
De nuestro archivo: Leonardo Scarparo es vocero de los productores acusados de las quemas en el delta: “Se busca sacar al isleño del lugar y utilizar esas tierras para otra cosa”
“Hay muchas opiniones de que nosotros quemamos para renovar el pasto y eso es una falacia. No existen motivos técnicos ni productivos para llevar adelante este tipo de quemas. Este es el momento en que nosotros guardamos reservas. Si la isla se quema no tenemos comida para la hacienda y la tenemos que sacar”, aseguró el vocero.
Y agregó: “Tampoco está relacionado con la ganadería. Esa actividad no es nueva sino que tiene más de 150 años en la zona y está en retroceso. Cada vez hay menos ganado y cada vez hay más fuego”, afirmó Scarparo.
Pero en contra de lo que podría pensarse, la CIAC no se fundó para buscar responsables sino para facilitar herramientas que ayuden a discutir problemáticas invisibilidades desde hace mucho tiempo.
“La identificación de responsables le corresponde a la Justicia y a las fuerzas de seguridad. Nosotros proponemos, con nuestro conocimiento de la zona, distintas herramientas. Hemos hecho una cuadrícula de pobladores donde nos mantenemos en contacto continuamente con el Plan de Manejo del Fuego y damos aviso temprano sobre focos de incendios; hemos solicitado la confección de cortafuegos; hacemos hincapié en el tema seguridad para que se refuerce en la zona, y tratamos de ser lo más objetivos posibles”, indicó el productor.
Mirá acá el documento que redactaron:
CIAC. Propuestas tema incendios
-¿Y cómo recibieron las autoridades el trabajo que vienen realizando hasta el momento?- le preguntamos.
-Fundamentalmente en Entre Ríos, dada la actuación que hemos tenido, hemos recibido un reconocimiento por nuestro trabajo. Con la municipalidad de Victoria también estamos en contacto. La gente de la isla se apoya un poco en nosotros porque somos la voz cantante de los problemas. Hay muchos problemas por resolver allí, no solo el fuego. Hay abigeato, violación de propiedades privadas, hay un combo de cosas. Al juntarnos hemos reconocido estas falencias. Hay cosas de las que no se habla, como cuestiones sanitarias y culturales de la gente de las islas, que también nos interesan. El fuego y las acusaciones nos aglutinaron y vimos muchas cosas para hacer, para mejorar, no solo en términos de productividad sino de cuidado del medioambiente y de la calidad de vida de la gente que vive acá.
Finalmente Scarparo remarcó: “Hay una relación inversa entre la ganadería y el fuego: a más ganadería menos fuego, a menos ganadería más fuego”.