El jardín de la periodista Eleonora Cole se presenta como su cable a tierra. Para ella, la jardinería es mucho más que una actividad recreativa: es una forma de desconectarse del mundo de las noticias y encontrar calma en medio de la naturaleza.
Esta nota fue grabada en el pasado otoño, en su lugar ubicado en el barrio de Benavídez, al norte del Gran Buenos Aires.
Periodista de actualidad en TV y en el streaming La Casa, Eleonora comparte a diario distintas realidades. Pero en el ámbito agropecuario se la conoce también por haber conducido durante muchos años los programas Hombres de Campo junto a El Cholo Gómez Castañón y +Campo en LN+, .
Sin embargo, en esta ocasión se la ve desde otro lugar: rodeada de verde, entre plantas y flores, feliz. Como suele suceder, los jardines y las huertas logran transportarla y reconectarla con lo más esencial: la naturaleza.
Mirá la recorrida del jardín de Cole por el equipo de De Raíz:
El espacio fue diseñado por su amiga y paisajista Isabel Bagnardi, quien creó un jardín de ingreso relajado a partir de distintas formas, texturas y tonalidades de verde. Además fue creando diferentes jardines y rincones en el espacio del fondo, donde cada espacio invita a recorrerlo.
En su relato para De Raíz, Cole cuenta cómo su familia fue eligiendo y dando forma a cada sector del jardín. Cada espacio tiene su propio sentido: hay rincones para descansar, leer, escuchar música o simplemente disfrutar del silencio. “Me encanta el jardín; es un gusto que fui adquiriendo con los años”, dice Eleonora.
Entre sus especies se destacan los helechos, orejas de elefante, costillas de Adán, boina de vasco, agapantos, distintas variedades de salvias, rosas, sedums y jazmines. El perímetro está enmarcado por un ceibo, un tilo, dos jacarandás y dos acer.
Además, Eleonora cuida personalmente una huerta de la que su familia obtiene alimentos frescos. “Esto es prueba y error, soy autodidacta”, admite, orgullosa de lo que aprendió con la práctica.
El jardín también incluye un estanque, elemento que no podía faltar. El agua, símbolo de calma, se ubica cerca de la galería, donde la familia pasa los fines de semana descansando y disfrutando de la serenidad del entorno.