En los últimos días se publicó el reporte mensual del USDA (Departamento de Agricultura de los Estados Unidos), que puso “mucho foco en Sudamérica”, pero más que nada sobre la producción proyectada de Brasil y sin medir todavía el impacto que tendrá la fuerte sequía sobre la oferta de granos y oleaginosas de la Argentina.
Eso es al menos lo que piensa Dante Romano, que es profesor e investigador del Centro de Agronegocios y Alimentos de la Universidad Austral. “Si bien se redujo la producción de Brasil ante la seca en el extremo sur, no se realizaron cambios significativos para Argentina, mientras que las instituciones locales hablan de mermas importantes”, consideró el experto sobre el reporte del USDA.
“En maíz, mientras en Argentina no logra terminar la implantación y el área va cayendo, Brasil apuesta a una excelente safrinha”, apunto Romano. Y añadió que “localmente mientras el maíz temprano retomó la senda alcista, convencidos los operadores de que faltará mercadería, lo que vemos en el tardío es que se produce un ajuste a la baja, esperando que entre la buena cosecha de Brasil y la de Argentina tengamos de junio en adelante una situación completamente diferente, muy ofrecida de maíz sudamericano”.
El USDA estimó que la Argentina cosecharía 45,5 millones de toneladas de soja, unas 4 millones menos que en su estimación previa” pero muy por encima de los pronósticos locales. Por caso la Bolsa de Comercio de Rosario redujo 45% su estimación de producción de soja para la región núcleo y la ubicó en unas 37 millones de toneladas. Mientras que la Bolsa de Cereales de Buenos Aires redujo el área esperada y habló de solo 41 millones, pero en un escenario moderado. El el pesimista, ya habla de 39 millones.
“Los privados ya hablan de un número que comienza con 3. Sólo 4% de los cultivos lograron ser ubicados en la calidad buena a muy buena. Pero el USDA estima para Argentina 45,5 millones”, se quejó el especialista de la Universidad Austral.
En maíz, la llegada de lluvias ayudan a que se incorporen lotes. Sin embargo, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires se vio obligada a reducir en 200.000 hectáreas la intención de implantación. De todas formas sólo 83% de la misma se encuentra implantada, un mínimo histórico. “Recordemos que el USDA estima una cosecha de 52 millones, sin cambios respecto al año anterior”, sumó Romano.
Lo hacen para frenar la inflacion mundial, hasta que se coseche, pueden seguir mintiendo.
Y ademas, saben que el productor va a vender todo lo que tiene, no va a poder acopiar.