Esta semana el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa) advirtió a los productores ganaderos que aquellos que no den cumplimiento en los plazos previstos a la Determinación Obligatoria del Estatus Sanitario (DOES) establecida por el Plan Nacional de Control de Brucelosis bovina, no podrán seguir comercializando hacienda destinada al mercado chino, que es –nada menos– que el comprador del 80% de lo que Argentina exporta al mundo.
La normativa vigente dispone que aquellos establecimientos que tienen más de 300 vacas deben determinar el estatus sanitario de sus rodeos antes del 31 de julio próximo, mientras que los productores con menos de 300 vacas tienen tiempo hasta el 30 de noviembre del 2021. Una vez cumplidos esos plazos, en caso de no determinar el estatus, el establecimiento quedará registrado como “no apto China” y deberá realizar el procedimiento obligatorio para poder ser “apto China”.
“Esto no quiere decir que no puedan mover animales, sino que no pueden ser proveedores de China. Si pasada esa fecha hacen la determinación, es decir el sangrado, y da negativo, pasan a ser nuevamente proveedores”, explicó a Bichos de Campo Ximena Melón, directora Nacional de Sanidad Animal de Senasa.
Pero, ¿existe riesgo de que la nueva exigencia pueda llegar a provocar una caída en la cantidad de empresas con capacidad de ofrecer vacas de corte con destino a China? Desde Senasa indicaron que el cumplimiento del DOES está en este momento en un rango de 25% a 30% de la hacienda total. Si bien resta controlar la mayor parte de los animales, Melón afirmó que ese número se encuentra concentrado en pocos establecimientos ganaderos y que antes del 31 de julio la proporción subirá considerablemente, descartando así cualquier posible restricción de oferta.
“Hay que tener en cuenta que el grueso de la hacienda nacional está en establecimientos más grandes. Aquellos que tienen que cumplir el plazo del 31 de julio son menos establecimientos agropecuarios, pero representan más hacienda. Por lo cual abarcarlos nos permite manejar plazos más cortos y mantener el abastecimiento del mercado de China”, aseguró Melón.
De nuestro archivo: ¿Cambios en el programa de Brucelosis? Claves para entender qué propone Senasa y qué piensan los productores
-¿Por qué no se consiguió un porcentaje más alto de cumplimiento del DOES hasta el momento?
-Porque no había las alternativas que hay ahora. Ese sangrado debía hacerse (antes del cambio normativo introducido recientemente) sobre la totalidad de los animales del establecimiento; en cambio ahora damos la alternativa de hacerlo con un muestreo. Es decir, tomar una parte de los animales y no todos. Eso también da la oportunidad de que los laboratorios de red de brucelosis den abasto para los plazos que estamos pensando.
La funcionaria agregó que, precisamente, el objetivo es evitar un “cuello de botella” y dar plazos que permitan cumplir con los protocolos acordados con China al momento de una auditoría de los servicios sanitarios de la nación asiática.