Los datos de los envíos de bovinos a faena del primer semestre que informa el Senasa reflejan el fuerte impacto de la sequía sobre la ganadería y permiten inferir lo que puede pasar en la segunda parte del año con el negocio ganadero.
Con el mes casi cerrado, en junio la faena fue de 1,25 millones de cabezas. Las hembras sumaron 605.800 lo que representó el 48,5% del total. Y las vacas fueron 294.200.
Respecto de mayo pasado hubo una caída del 4% en el total de ventas de hacienda a los frigoríficos, aunque si se la ajusta esa oferta por días hábiles el promedio es diario es similar al del mes pasado.
En el caso de las hembras la caída entre meses fue mayor, llegó al 6% y en la categoría vacas en particular la reducción de la oferta fue de casi 9%.
Esto da cuenta de que se empezó a cortar la oferta de vacas cuya salida de los campos de cría este año se anticipó consecuencia de la sequía que también adelantó la salida de los terneros que tuvieron como único destino el engorde a corral.
Esa menor oferta de vacas, cuyo destino principal es la exportación a China, es la que llevo a una mejora importante en los precios en las últimas semanas. A mediados de mes esta categoría promediaba los 192 pesos por kilo vivo contra los 240 pesos de este viernes. La suba entonces fue de 25% en sólo dos semanas, aunque siguen siendo valores muy atrasados respecto de la inflación.
En cuanto a lo acumulado en el primer semestre, los envíos a faena sumaron 7,3 millones de cabezas contra los 6,5 millones del año pasado, lo que indica un aumento de 12%. La participación de las hembras promedió el 48% y la faena de vacas sumó 1,67 millones de cabezas, lo que indica un incremento de 19% con respecto a lo acumulado en el primer semestre del 2022.
En adelante se verá otra composición en las ventas a frigoríficos. Según los analistas la caída en las vacas se irá acentuando, lo que podría implicar subas considerables de los precios si se confirma que los valores de lo que se exporta a China llegaron a un pico con posibilidad de rebote, en tanto nos acercamos a los meses previos del año nuevo lunar, que es cuando más se siente la demanda desde ese mercado.
Por otra parte, se incrementará la faena de novillitos y vaquillonas. Esas categoría ya están comenzando a salir de forma masiva de los corrales, lo que se sostendrá al menos hasta octubre.
Desde la primavera en adelante es muy probable que entremos en un período de baja oferta de ganado, como consecuencia de que con la primavera habrá más interés por la cría, es decir, por la retención y reposición de vientres.
También se reducirá la oferta de ganado de los corrales que tendrán dificultades para reponer ya que también se espera una suba del ternero.
La invernada ya está aumentando por la caída en la oferta y porque hay otro ánimo en los recriadores que atraviesan un invierno menos frío de lo normal.
En los remates recientes los precios corrientes van de los 500 a 540 pesos, es la primera categorías, en mostrar una reacción que se sostendrá en adelante por lo que la compra de parte de los feedloteros se va a complicar.
En conclusión, es muy probable desde la primavera en adelante el escenario sea de poca oferta de hacienda para la faena, de terneros para el engorde y de vacas por lo que los precios se afirmarían.
En cuanto la oferta para la faena, la moderación o reducción se sostendría durante varios meses ya que habrá que esperar a los procesos de recria y engorde que llevan desde 6 meses a un año o a que los feedlots saquen lo que encierren en la próxima zafra.