En tiempos de crisis para la lechería argentina, porque cerraron cientos de tambos y porque la actividad se concentró, hay productores que apuestan a un modo de producción diferente, se reinventan y subsisten. Es el caso del primer tambo orgánico certificado de la Argentina, que además es el primer tambo fábrica de quesos orgánicos. Está situado en Tandil.
¿Qué implica ser productor orgánico en lechería? Que en el establecimiento los animales crecen sobre praderas y reciben alimento a base de pastura y forrajes orgánicos, totalmente libres de agroquímicos o transgénicos.
Aldo Antonutti, quien lleva adelante este tambo orgánico, recuerda sus comienzos y no esconde el orgullo hacia sus padres, aunque tampoco niega que estaban un poco locos al arriesgar tanto. “Hace 25 años, cuando arrancamos, era un riesgo pensar y producir de modo diferente, y los protagonistas son mis padres, que dejaron la comodidad de vivir en la ciudad de Buenos Aires para encontrar el negocio en Tandil. Había que estar un poco loco para pensar así en esa época”, afirma.
“La cuestión es que ellos transformaron un hobbie en un proyecto de negocio y comenzaron a producir de forma ecológica cuando en ese momento no existía ley o reglamentación alguna, ni siquiera resolución del Senasa, pero empezaron a producir basados en certificaciones europeas”, dijo Aldo en diálogo con Bichos de Campo.
Desde 1993 que funciona este tambo produciendo lácteos de forma 100% orgánica. Unos 26 años más tarde, Aldo decidió relanzar la marca con un concepto más moderno. “Santo Padre” es el nombre que lleva su línea de quesos orgánicos: Se elaboran, por el momento, tres variedades: Gouda, Provolone y Parmesano. El último es la vedette del negocio, y se vende con una maduración de 6 y 12 meses.
Escuchá lo que nos decía Aldo Antonutti:
Son 7 las personas que trabajan en el establecimiento de 95 hectáreas, en el cual hay 95 vacas en ordeñe, y esperan llegar a 100 vacas en producción para fin de año. “Se están dando las condiciones para que Argentina se convierta en un país productor de leche orgánica. Hay un gran potencial, de hecho están empezando a entrar multinacionales interesadas en invertir en el negocio”. Es vox pópuli en el sector que Nestlé está a la búsqueda de leche orgánica certificada.
El joven empresario se mostró orgulloso por el camino recorrido y el negocio heredado de sus padres. “Hoy el 100% de la producción de Santo Padre va al mercado interno, generamos nuestro propio canal comercial y atendemos directamente nosotros los más de 130 puntos de venta y 25 restaurantes. También estamos presentes mediante retail en más de 17 sucursales de supermercados Carrefour”.
“Creo que tenemos un gran potencial y camino por recorrer, pero lo que más nos importa es poder contagiar lo que hacemos a otros productores. Actualmente trabajamos con dos tambos de la zona para poder convertirlos hacia la agricultura orgánica. Y en un futuro nos gustaría poder acceder al mercado externo”, añade el emprendedor.
Luego concluye: “Se puede ser sustentable y rentable, y es una verdadera alternativa de negocio para aquellos tambos familiares que están cerrando porque no ven salida. Hay otro camino y otra alternativa de producción”.