La Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) ajustó la proyección de cosecha argentina de soja a 40,0 millones de toneladas, mientras que en el caso del maíz el número final se ubicaría en 47,7 millones de toneladas.
Se trata de cifras lejanas a las proyectadas en el informe mensual del USDA difundido ayer, que pronosticó 43,5 millones de toneladas para soja y 53,0 millones para maíz.
Las lluvias de febrero pasado estuvieron lejos de alcanzar las medias y las pérdidas productivas en soja y en maíz son históricas con rendimientos que estarán por debajo de la campaña 2017/18, que estuvo caracterizada por una importante sequía.
En el área que se extiende desde el norte de San Luis, franja central de Córdoba y centro-sur de Santa Fe, la BCR estima que se perdieron al menos 1,80 millones de toneladas de soja.
Las lluvias ocurridas el mes pasado mejoraron en otras zonas productivas el potencial de rinde de la soja de segunda, lo que permitiría compensar las pérdidas ocurridas en el sector norte de la región pampeana.
Las provincias que sumaron en marzo algunos quintales claves para sostener la producción argentina son Entre Ríos, La Pampa y Salta, Chaco y Santiago del Estero. Con el actual panorama, el rendimiento nacional de soja promediaría apenas 26,2 qq/ha, según la entidad.
“En el norte argentino, lo que suceda con las lluvias de los próximos días será fundamental para seguir limitando los daños, ya que la soja está entre fructificación y principios del llenado con áreas muy importantes que casi no recibieron agua durante buena parte de febrero”, explica el informe de la BCR.
En cuanto al maíz, las labores de cosecha alcanzan un 8% del área nacional. “En la región núcleo pampeana la actividad de recolección muestra valores extremadamente dispares y bajos: hay numerosos lotes que salen con rindes de 30 a 60 qq/ha. También hay lotes de 80 y 90 qq/ha, pero por ahora son los menos”, remarca el informe.
“Pero las proyecciones de rindes de las siembras tardías atemperarían el pobrísimo desempeño de los tempranos de la franja central. Los maíces tardíos transitan etapas críticas, pero, en el oeste de la región pampeana, dónde tienen mayor participación, están contando con condiciones ambientales satisfactorias”, añade. El rinde promedio nacional se estima en 70,8 qq/ha (versus 71,3 qq/ha proyectado en febrero pasado).