La empresa láctea Mastellone Hnos, reconocida por su para insignia La Serenisina, completó exitosamente el proceso de canje de sus Obligaciones Negociables por un monto de 200 millones de dólares y de esta manera logró alejar los fantasmas de un posible default, que había asomado tras los resultados del primer trimestre 2021, con pérdidas por 828,3 millones de pesos.
Según detalló la empresa en la nota enviada a la Comisión Nacional de Valores (CNV), luego de un arduo proceso de negociación con sus inversores, logró canjear el el 82,25% de sus Obligaciones Negociables Clase F por un valor nominal de aproximadamente 164,2 millones de dólares.
Además, el objetivo fue alcanzado mediante una compleja transacción que comprendió la utilización de una combinación de distintos instrumentos financieros, como la la emisión de un nuevo bono internacional por un monto de casi 111 millones de dólares; la colocación, por primera vez en la historia de la compañía, de Obligaciones Negociables en el mercado de capitales de Argentina por un equivalente a 45 millones de dólares y, por último, la obtención de un financiamiento bancario externo de largo plazo por 50 millones de dólares otorgado por el Rabobank.
“Esto demuestra la solidez y perspectiva de futuro que tiene nuestra empresa y redobla nuestro compromiso con toda nuestra cadena de valor”, sostuvo Carlos Agote, presidente del Directorio, en un comunicado enviado por la compañía.
Lo cierto es que la empresa viene atravesando una compleja situación financiera desde hace varios meses, producto, en gran medida, a la imposibilidad de trasladar el aumento de los costos de producción a las góndolas ante la fuerte política que ejerce el gobierno nacional en el control de precios. Solo durante el año pasado acumuló pérdidas por 2287 millones de pesos, que se multiplicaron por cuatro respecto del año 2019, comportamiento que se atribuyó al control de precios sobre la mayoría de sus productos, ya que en ese ejercicio 2020 la firma vendió más litros de leche que en 2019 y también pudo aumentar sus exportaciones.
Otro dato por tener en cuenta es que, a pesar de sumar una mayor facturación, vía inflación, los ingresos de la empresa durante el primer trimestre de este año fueron de 19.104,85 millones de pesos, 11% inferiores a los de los tres meses iniciales de 2020.
Otra alimenticia que trajo novedades esta semana es la gigante de Arroyito, provincia de Córdoba, la firma Arcor, que este año celebra su 70 aniversario y acaba de lanzar al mercado una nueva versión de su emblemática golosina, el Bon o Bon y para esto concretó una inversión de 500.000 dólares.
En su primer año de lanzamiento, Bon o Bon dulce de leche tendrá una producción total estimada de entre 600 y 800 toneladas, lo que equivale a 50 millones de unidades. La nueva versión, al igual que toda la línea de Bon o Bon, se produce en la planta ubicada en Colonia Caroya, provincia de Córdoba. En primer lugar, se exportará a Chile, Uruguay, Paraguay, Bolivia, Perú, Ecuador, Centroamérica e islas del Caribe, España; para luego sumar México, Estados Unidos, Canadá, Rusia, Mongolia, Emiratos Árabes Unidos, Tailandia, Palestina, Israel, Jordania, China y Japón.
Actualmente Grupo Arcor exporta el 70% de la producción de bon o bon, con ventas de más de 16.000 toneladas.