Hoy los cazadores chubutenses tienen un motivo para estar contentos: se retoma la temporada de caza de liebres y la producción de este tipo de carne para exportación. En 2019 el frigorífico Esquel cerró sus puertas ante el cese en la caza por las condiciones de mercado y la falta de rentabilidad, y luego la pandemia complicó todavía más las cosas. Pero un reciente acuerdo entre el Ministerio de Agricultura provincial y la empresa Patagonia Meat -que se encargará de la faena y venta al exterior- volvió a prender los motores.
“Para la provincia implica empleo genuino, la reactivación de economías regionales y que se despierte el interés de inversores. En un escenario normal se generan entre 55 y 60 millones de pesos de ingreso directo e indirecto en la provincia. Implica que el estado provincial deje de subsidiar por primera vez esta actividad y pase a recaudar por la misma”, dijo a Bichos de Campo Leandro Cavaco, Ministro de Agricultura de Chubut.
La liebre común o europea (Lepus europaeus) fue introducida en el hemisferio sur y logró una expansión demográfica tal que permite la habilitación de su caza con fines comerciales sin poner en riesgo su existencia. El período de caza se extenderá hasta mediados de agosto y se trabajará por primera vez, y como caso excepcional, con un frigorífico de la empresa pampeana Patagonia Meat SA.
Esto se debe, según explico el ministro, a una falta de interés del sector privado y a un problema estructural. A diferencia de lo que ocurre en las provincias patagónicas, en La Pampa no se abona lo que se conoce como “zona desfavorable”, que es nada menos que una ayuda a las provincias con condiciones de producción más difíciles. Frente a eso, la producción por fuera de Chubut tiene un 20% menos de costo.
“Si como empleado cobras 100 pesos, hay 20 pesos adicionales por ser zona desfavorable. Eso genera un costo diferencial de mano de obra y que las inversiones se coloquen en otro lugar. Lo que nosotros proponemos es que ese pago se compense con créditos en AFIP para atraer esas inversiones”, indicó Cavaco.
Con esta idea en mente, el objetivo es que el próximo año toda la campaña este concentrada en Chubut, desde la caza hasta la faena y posterior exportación de la carne a otros países.
En el mientras tanto será ese frigorífico el encargado de controlar los permisos de los cazadores y el cumplimiento de los protocolos con la subsecretaría de ganadería provincial.
Para poder participar del programa, los cazadores deberán estar registrados, al igual que sus armas, y tener su permiso de caza al día. Cada uno recibirá 250 pesos por liebre más cuatro municiones.
Si bien hasta 2019 el principal comprador fue Italia, ahora la mayor demanda proviene de Holanda y Alemania. En esta primera etapa faenarán hasta 180 mil liebres que se espera poder colocar pronto en el exterior.
“El Estado tiene que acompañar el desarrollo del sector privado para que despeguen diferentes esquemas productivos. Lo que no quiere decir que tenga que estar constantemente encima de él. Esa es la orden que nos da nuestro gobernador pensando en la modificación de nuestra matriz productiva, para pasar de una matriz extractivista a una de agregado de valor”, aseguró el ministro.