Horas decisivas respecto al futuro de la producción yerbatera se están viviendo en Misiones. Es que según cuentan medios locales que conocen el mundo productivo provincial, el Gobierno Nacional habría designado por fin un presidente para el Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM), luego de casi dos años sin hacerlo, tal como lo marca la ley.
Según las crónicas misioneras, el apuntado sería Rodrigo Correa, un contador público que no tiene experiencia en el mundo yerbatero, pero que supo tejer buenas amistades con los referentes libertarios en la provincia del noreste del país.
De acuerdo a lo que consigna Economis, Correa ya se habría reunido con algunos industriales yerbateros y tuvo el visto bueno de Adrián Nuñez, el referente libertario en Misiones, quien le dio la bienvenida a la Libertad Avanza luego de mantener una reunión.
De acuerdo a lo que publicó Plan B, Correa, aunque no cuenta con trayectoria en el rubro yerbatero, ejerce como contador público y posee un posgrado en materia tributaria. Además, se desempeña como consultor y empresario, liderando un proyecto vinculado a la industria cárnica y participando activamente en el ámbito ganadero. Cabe destacar que Raúl Karaben, quien fuera presidente de Piporé y director en el INYM, supervisó su tesis de posgrado.
Por otro lado, Correa mantiene una relación cercana con Enrique Lanari, padre de Javier Lanari, periodista formado en Misiones y actual secretario de Prensa de la Presidencia en reemplazo de Manuel Adorni. Javier Lanari, a su vez, tiene estrechos lazos con los hermanos Milei y el jefe de Gabinete actual.
La designación, de confirmarse, vendría a representar un cambio rotundo en la política hacia el sector yerbatero, ya que el propio Javier Milei se negó durante dos años a designar un presidente para el Instituto, tal como ocurre desde hace más de 20 años, y como establece la ley 25.564.
El DNU 70/23 de Milei de diciembre de 2023 fue el puntapié para desregular al sector yerbatero, derogando artículos clave de la ley principal, y eliminando la facultad del INYM para fijar precios, lo que generó gran controversia y caída de precios para los productores. Actualmente, el INYM pasó a ser más parecido a un órgano de promoción que a un ente regulador.
El giro busco, además de ubicar a un alfil político, busca calmar las aguas de lo que es una crisis yerbatera a todas luces, que desde la publicación del DNU 70/23 mantiene a los pequeños colonos misioneros al borde del colapso, con paradas de cosecha, protestas en las rutas y solicitando de forma vehemente una protección ante la catástrofe económica de sus fincas.
La provincia de Misiones, además, acaba de ampliar su denuncia ante la Corte Suprema para frenar ese desmantelamiento en el INYM, intentando resguardar a los productores. Recientemente, la Provincia presentó una ampliación de la demanda iniciada meses atrás, tras la publicación del Decreto Nacional 812/25 que profundiza el recorte de atribuciones del INYM. Según explicaron, esta acción judicial busca asegurar que el organismo recupere la totalidad de las facultades que la ley le asigna para ordenar la cadena yerbatera.
El Gobierno provincial, a través de la cartera agraria, subraya que el INYM es una pieza institucional central para equilibrar un mercado atravesado por fuertes asimetrías. Su debilitamiento deja a los pequeños productores sin herramientas de resguardo, reduce su capacidad de negociación y expone a las chacras familiares a condiciones adversas que amenazan la continuidad de su actividad.
En esta línea, el gobierno provincial entiende que existen iniciativas orientadas a dinamizar la competitividad del sector, aunque sostiene que desregular al INYM no es el rumbo adecuado: sin un organismo fuerte, los pequeños productores quedan expuestos y se compromete la estabilidad de toda la cadena. Por eso la Provincia advierte que la desregulación promovida por la gestión de gobierno nacional es el origen del retroceso institucional que hoy enfrenta el Instituto.
La presentación judicial se enmarca también en el pedido reiterado al ejecutivo nacional para la designación de un presidente del INYM con facultades reales de conducción y control. La conducción del organismo -señala la Provincia- debe estar en condiciones de ejercer plenamente sus responsabilidades, y no limitada a una figura meramente formal que impida el funcionamiento previsto por la normativa vigente, tal como entienden que puede suceder con Correa.
En este contexto, el ministro del Agro, Facundo López Sartori, señaló que la Provincia sostiene una defensa activa del sector yerbatero y no permitirá retrocesos que pongan en riesgo a quienes sostienen la base productiva. Señaló que el ejecutivo misionero “mantiene una posición clara: defender al productor y preservar reglas de juego que garanticen un mercado más equilibrado”.
Foto de portada: Plan B Misiones





