Adolfo Von Ifflinger Granegg es productor de cerdos y coordinador de la comisión de porcinos de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA). Y como buen productor de carne enarbola la idea de valor agregado en origen. “Debería haber una política de estado para transformar la proteína vegetal en animal”, exclamó.
La Argentina, al parecer, se encuentra frente a una oportunidad histórica, la de intentar abastecer parte de la demanda cárnica que se generará en China debido a los múltiples casos de Peste Porcina Africana, que diezmarán su stock porcino de modo considerable. Eso genera muchas expectativas en los productores locales, como es el caso de Adolfo.
“Todas las noticias van en esa dirección, y habrá que aumentar la producción para abastecer la demanda internacional de acá a 3 o 4 años, dependiendo como solucione China su cuestión sanitaria”, señaló el productor de cerdos a Bichos de Campo.
Aquí la entrevista completa con el productor y dirigente rural:
“Lo que necesitamos son políticas de estado y crediticias para poder aumentar la producción porcina. Hay que tener en cuenta que cada madre productiva cuesta de 7 mil a 10 mil dólares, dependiendo de la tecnología. Así que una granja con 100 madres puede costar hasta 1 millón de dólares. Es toda una apuesta”, señaló el productor.
“Hacen falta políticas de Estado -insistió- y apuntar a ser, en vez del supermercado del mundo, la rotisería. Apuntar a vender un carré de cerdo horneado, con papas de Balcarce y tomates de Mendoza, listo para meter en un microondas en otro país. Siempre pongo ese ejemplo”, finalizó.