El cronómetro no se detiene. A pocas semanas de que venza el plazo de gracia que otorgó el Senasa para implementar su famosa resolución 180, que permite el ingreso de carne con hueso en el sur, los productores de la Patagonia piden salir de la discusión meramente económica y enfocarse en las consecuencias sanitarias. Este jueves, el sector se reunirá nuevamente con las autoridades nacionales.
En el marco de la Jornada Nacional del Agro (Jonagro), que tuvo lugar este martes en la sede de la Bolsa de Cereales, Bichos de Campo dialogó con el dirigente santacruceño Enrique Jamieson, una fuente de consulta frecuente en lo que respecta a la producción ovina del sur.
A sólo horas de verse nuevamente las caras con el miembros del Senasa y la Secretaría de Agricultura, el dirigente se acercó hasta el microcentro porteño para recordarle al sector productivo que el levantamiento de la barrera sanitaria podría tener serias consecuencias sobre las exportaciones argentinas. Y no sólo de carne de vaca, sino también del tradicional cordero, de oveja y de capón.
“La posición de todas las federaciones es clara: No se puede ensuciar la Patagonia en este contexto internacional”, afirmó. Como titular de la Federación de Instituciones Agropecuarias de Santa Cruz, la principal provincia exportadora de carne ovina, Jamieson alertó por los mercados que se perderían si se pone en riesgo el status sanitario de la Patagonia. Todo el polo frigorífico de la zona está en alerta.
Al día de hoy, afirman los productores del sur, ser una zona libre de aftosa sin vacunación permite venderle a socios clave, como los europeos. Por eso intentan correr el foco de la discusión y, en vez de hablar de los precios en las góndolas o los costos productivos, advierten por los efectos que tendría la relajación de los controles sobre nuestra inserción internacional.
Mirá la entrevista completa con Enrique Jamieson:
La reunión que mantendrán este jueves las partes interesadas es esperada por ansias por los productores y ruralistas patagónicos porque restan unos 30 días del plazo de 3 meses fijado por el Senasa para que se implemente la Resolución 180/2025. Varios de ellos, consultados por Bichos de Campo, confían en que esta vía de diálogo llegará a buen puerto y que se impondrá su postura.
“Queremos sostener un trabajo de más de 20 años, con el que logramos un reconocimiento que muchos países anhelan”, aseguró Jamieson. A propósito de eso, son pocos los países declarados libres de aftosa sin vacunación, y en el selecto grupo que integra Nueva Zelanda, Estados Unidos y algunas naciones europeas promete también meterse uno de nuestros máximos competidores, Brasil. Por eso es que, insisten, Argentina no puede arriesgarse a perderlo.
La contrapropuesta que hacen los productores al sur del Río Colorado es que, más que levantar los controles, se corra la barrera hacia el norte. Así, cada vez más zonas, y eventualmente todo el país, podrían adquirir el mismo status que hoy sólo tiene la ganadería patagónica. Sería la salida para que no peligre el mercado del cordero patagónico y, por qué no, el asado pampeano también se coma en el sur.
“Si Argentina se declara zona libre de aftosa sin vacunación, nosotros recibiremos con gusto todo el asado y las medias reses del norte”, apuntó el ruralista, que igualmente pidió que haya una solución cuanto antes al debate iniciado hace semanas.
“Este impasse no le hace bien a nadie. Hay que tener reglas claras para jugar el partido”, agregó.