El paso de Mauricio Macri por la Sociedad Rural de Gualeguaychú no pasó desapercibido, porque en la conferencia que brindó el Presidente mostró su rechazo al falló de la justicia que impide utilizar agroquímicos en un radio de 1 kilómetro alrededor de las escuelas rurales o zonas pobladas, o hasta 3 kilómetros en caso de las aplicaciones aéreas.
Una de las entidades que estuvo presente en ese encuentro con Macri fue la Federación de Asociaciones Rurales de Entre Ríos (Farer). Su presidente, Raúl Boc Hó, dijo a Bichos de Campo que “más allá de que fue una oportunidad muy buena de que un presidente de la Nación viniera a escucharnos, le comentamos que estamos en un vaivén desde 2018 entre fallos judiciales, amparos y decretos, lo que genera una gran incertidumbre” en materia de uso de defensivos agrícolas.
“El productor agropecuario no sabe lo que se puede y no se puede hacer, ni siquiera si un domingo puede aplicar un producto cualquiera, incluido un fertilizante líquido. Se simplificó todo pensando en la soja, pero Entre Ríos tiene otras actividades. Por ende se afecta también a la producción ganadera, de citrus, de nuez pecán y de arroz”, agregó Boc Hó.
Escuchá la entrevista completa a Raúl Boc- Hó:
El presidente de Farer declaró que “los contratos de arrendamiento se caen y los tiempos también nos perjudican, porque cuando entrás en la judicialización de temas técnicos o productivos, estos van por un carril de tiempo que no es el que tenemos los productores, debido a que hay determinadas fechas para aplicar productos cuando aparecen enfermedades o plagas en los cultivos. Hacerlo uno o dos días antes o después, puede ser determinante para nosotros”.
Para Boc Hó “el tema trasciende lo productivo porque está politizado. En Entre Ríos, durante dos años se trató de consensuar una nueva ley de fitosanitarios. Se armaron comisiones bicamerales de todos los partidos políticos y hubo montones de audiencias públicas. Finalmente se consensuó un proyecto de ley, que aunque no nos satisfizo del todo, era un proyecto superador al que tenemos. Pero se frenó por una interna política entre Bordet y Urribarri (los dos principales referentes peronistas de la provincia). El resultado es que nos quedamos sin ley en Entre Ríos”, se lamentó.
Abandonar la producción de soja y maíz transgénicos, está claro. El que no lo entiende es un eco-gemocida.