Aunque parezca una joda, el título de esta noticia es de una notable contundencia informativa: es que se ha desbocado tantas veces el presidente Javier MIlei, cuando era candidato y también luego, en ejercicio de su cargo, hablando pestes sobre el régimen del gobierno de la República Popular China, que sin duda es una novedad que haya decidido guardar las formas diplomáticas en su primer encuentro con Xi Jinping, la máxima autoridad de ese país.
Por suerte para el agro argentino, que depende y mucho de las compras de carne, soja y otros productos que hace ese país de signo comunista, no se le escapó ningún improperio al Presidente.
El comunicado oficial sobre esa reunión, sucedida en el marco de una cumbre del G20 que también sorprendió con un Milei sosegado y respetuoso de las formas diplomáticas internacionales, marca que la cortesía dominó la agenda de la reunión entre el presidente argentino y su par chino.
“En el día de la fecha, el presidente de la Nación, Javier Milei, sostuvo una reunión con el presidente de China, Xi Jinping, en el marco de la cumbre del G20 en Río de Janeiro, Brasil. Durante este encuentro, se trataron temas de relevancia para la relación bilateral, incluyendo la cooperación constructiva y la ampliación de las relaciones comerciales entre ambos países”, es el inicio de dicho comunicado.
Luego, como novedades más relevantes y sis usar adjetivos calificativos de ningún tipo, la Presidencia informó que “China expresó su interés en incrementar el comercio con la República Argentina, mientras que Argentina manifestó su vocación de diversificar y aumentar su oferta de exportaciones al mercado chino. Ambas naciones acordaron seguir trabajando en el fortalecimiento de sus lazos comerciales y en el desarrollo de proyectos conjuntos que beneficien a ambas economías”.
“Durante la sesión se reafirmaron los vínculos y acuerdos comerciales y financieros vigentes, así como la vocación de seguir explorando nuevas oportunidades para ampliar y mejorar todo lo que involucra el fortalecimiento de la relación bilateral”, se indicó tras la reunión entre Milei y Xi Jinping, que se invitaron mutuamente a visitar ambos países.
No hubo avances concretos, al parecer, en las materias de interés urgente para el agro de la Argentina, como al demorada aprobación de nuevos frigoríficos o la rehabilitación del comercio a la carne aviar. Es de esperar que ahora puedan destrabarse algunas de esta cuestiones pendientes. Al menos no se consolidará la tendencia de China a ignorar por completo los reclamos de la Argentina.
Y todo gracias a no haber insultado a Xi como lo que es: el jefe de una gran Nación, milenaria, que está logrando sacar a millones de personas de la hambruna y domina en el comercio mundial gracias a sus sucias políticas comunistas.
En representación de Argentina, participaron de la reunión el ministro de Economía, Luis Caputo; el canciller Gerardo Werthein; la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei; el ministro de Defensa, Luis Petri; el ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger; el vocero presidencial, Manuel Adorni; y el presidente del Banco Central, Santiago Bausili, junto con otros secretarios y funcionarios del gobierno.
En representación de China estuvo el presidente Xi Jinping y varios otros funcionarios que no son mencionados en la gacetilla oficial. Total, como ya dijo la ex canciller Diana Mondino, todos los chinos son iguales.