La candidata presidencial de Juntos por el Cambio, Patricia Bullrich, difundió este fin de semana el texto de una carta pública en la que recuerda que fue ese espacio el que defendió al sector agropecuario todo esos años “de los ataques del gobierno kirchnerista”.
En la carta, la candidata opositora trata de aclarar cuál es su propuesta para el agro pampeano, pero vuelve a meter la pata al reconocer que -a diferencia de lo que venía diciendo hasta ahora su espacio- presentará un proyecto de ley con un cronograma para eliminar gradualmente las retenciones a los granos y la carne recién en el momento en que la economía logre alcanzar el déficit fiscal cero y no antes. Es decir que la rebaja no comenzará desde el 11 de diciembre, sino recién cuando el programa económico logre el equilibrio fiscal que se propone lograr “dentro del primer año de gobierno”.
Un dato saliente de la misiva es que la presidenta del PRO la firma junto con quien ocupará el Ministerio de Economía en caso de un triunfo en las elecciones, el presidente de la Fundación Mediterránea Carlos Melconian. Y que por primera vez aparece a la par de ellos dos el nombre de Willy Bernaudo consagrado como el gran referente agropecuario de ese espacio.
“Vos y yo nos conocemos. Alguna vez nos cruzamos en una ruta o nos vimos en las calles de tu ciudad. Más de una vez me oíste defender a los hombres y mujeres del campo de los ataques del gobierno kirchnerista. Yo sé lo que significa el agro para la Argentina”, comienza la carta de Bullrich, que intenta así reforzar la “alianza natural” entre Juntos por el Cambio y el sector agropecuario más duro, que como todo en el país ingresó en tela de juicio con el sorprendente triunfo de Javier Milei en las primarias de agosto pasado.
Bullrich profundiza esa línea hablando en primera persona a los productores y argumentando que, a diferencia del libertario, ella sabe lo que sienten porque hace mucho tiempo que se ocupa del tema y porque ha recorrido todo el país. “Lo sé porque me hablaste de tu amor por la tierra y por tu comunidad. Me mostraste el esfuerzo que hacés para incorporar nueva tecnología. Y el orgullo que te da formar parte de la industria que le da de comer al mundo. También sé de tus pesares. De la falta de reconocimiento y de lo mal que te han tratado estos años. De la presión cada vez peor de los impuestos. Sé que vendiste tierras, que cambiaste de rubro, que tus hijos se fueron a la ciudad, con suerte, o se fueron del país y no quieren saber nada con volver”.
La carta, que incluye la firma formal de Bernaudo como referente para el sector (este agrónomo históricamente ligado a los grupos CREA y ex funcionario del gobierno de Cambiemos acompaña a Bullrich desde incluso antes de la conformación de esta coalición), intenta poner blanco sobre negro la propuesta de esa fórmula para el sector agropecuario, y que había quedado en una nebulosa tras varios idas y vueltas, con furcios incluidos, cometidos por la candidata, sobre todo en materia de retenciones.
“Esto es lo que va a pasar en mi gobierno desde el día uno y a lo largo de cuatro años”, promete ahora Bullrich, que enumera:
- Eliminaremos todas las retenciones a las exportaciones de las economías regionales desde el primer día de gobierno. También levantaremos todas las restricciones cuantitativas a la exportación mediante una ley, de tal manera de impedir que cualquier burócrata de un día para otro pueda
paralizar las exportaciones del país. Desde el primer día avanzaremos en alcanzar un solo tipo de cambio para insumos y productos. Esta medida implicará una sensible mejora en los ingresos de nuestros productores y en su cálculo económico - Durante mi primer año de gobierno voy a eliminar el déficit en las cuentas públicas. De esta manera, el Banco Central dejará de emitir para financiar el gasto y bajará drásticamente la inflación que está destruyendo a la sociedad argentina, dando certidumbre a los trabajadores sobre su salario y a los productores sobre su negocio.
- Alcanzado el déficit cero, durante el primer año de mi gestión, se enviará al Congreso un proyecto de ley con un cronograma que, respetando el equilibrio fiscal, vaya reduciendo los impuestos a la exportación que subsistan, al ritmo de la baja del gasto público, de la reforma tributaria integral, y de los cambios en la administración tributaria.
- Nuestro objetivo es eliminar el sesgo antiexportador de la estructura tributaria para todos los sectores económicos del país, en el marco de respeto al equilibrio fiscal y de reducción del gasto público. En el caso del sector agropecuario, ello implica no sólo la eliminación de los derechos de exportación, sino además de otros impuestos y tasas provinciales, para lo cual se requiere también el compromiso claro de los Gobernadores. Nuestro compromiso es que al final de mi primer mandato, tengamos un nuevo sistema tributario libre de distorsiones antiproductivas.
“Tengo muy en claro lo que voy a hacer: exportar más y abrir mercados para que vos y la Argentina recuperen estos años desperdiciados y volvamos a ser líderes mundiales. Yo siempre estuve de tu lado. Cuando fueron por vos me viste ahí. Y voy a acompañarte siempre, en las buenas y sobre todo en las malas. Las malas se van yendo. Ahora vienen las buenas. Nos vemos el 22 de octubre”, finaliza la carta.
El texto se conoció a pocas horas de que el diario La Nación anticipara un acercamiento entre el espacio que compite por el voto agropecuario con Bullrich, La Libertad Avanza de Milei, con el docente universitario Fernando Vilella. No es un dato menor porque el partido de Milei carecía hasta ahora de referentes agropecuarios visibles. Vilella tiene prestigio ganado en el sector y, aunque aclaró que no ha habido ningún ofrecimiento formal sino apenas un intercambio de posiciones, llena ese espacio vacío.