Esta semana un grupo de funcionarios y representantes de la sociedad civil alemana recorrió la Argentina con el doble propósito de difundir la nueva normativa sobre deforestación que aplicará la Unión Europea a partir de 2025 y verificar el estado de situación al respecto en el país.
La recorrida culminó el viernes en la ciudad de Buenos Aires, donde se organizó un evento, titulado “Diálogos climáticos”, en el cual referentes alemanes expusieron sus argumentos en lo relativo a la necesidad de implementar una legislación a escala global para proteger los ecosistemas naturales.
El Reglamento de la Unión Europea para Productos Libres de Deforestación establece que a partir del 1 de enero de 2025 no podrán ingresar al territorio de la Unión Europea productos agroindustriales provenientes de zonas que hayan sido deforestadas luego del 31 de diciembre de 2020.
Los bienes comprendidos en la medida de la UE-27 son aceite de palma, carne vacuna, soja, café, cacao, madera, carbón vegetal y caucho, así como productos derivados de los mismos. Sin embargo, la normativa contempla la posibilidad de incluir en el futuro nuevos bienes (como puede ser el caso del maíz).
Un aspecto controvertido de la nueva normativa es que clasificará a los países, o incluso a regiones dentro de ellos, como de riesgo “bajo”, “estándar” o “alto”. Los productos de países de bajo riesgo estarán sujetos a un procedimiento simplificado de control, el cual se intensificará de manera proporcional en las siguientes dos categorías. Todos los países serán considerados inicialmente como de riesgo “estándar” y luego serán recategorizados por la UE-27 en función de la documentación y garantías presentadas por los mismos.
En el evento realizado en viernes Richard Fischer del Thünen Institute, organismo que integra el Ministerio de Alimentación y Agricultura de Alemania, aseguró que la “Argentina debería aprovechar la ventaja competitiva para poder lograr una mejor posición en el mercado europeo” y remarcó que estaba “muy impresionado” por el sistema diseñado por Ciara-CEC (Visec) para poder cumplir con la exigencia europea.
Sin embargo, Fisher dijo que “no todo el país podría estar en la misma categoría de riesgo” y mostró un mapa de la Argentina en el cual identificó sectores deforestados luego del año 2021, lo que implicaría que los mismos no podrán producir soja con destino a la UE-27 a partir de 2025.
“Allí donde la producción de soja y la deforestación coincide hay mucho riesgo, pero hay grandes superficies en el sur (por la región pampeana) con poco solapamamiento y eso lo digo yo, no es la opinión de la Unión Europea: creo que hay poco riesgo”, afirmó el funcionario alemán.
Fisher dijo, por lo tanto, que “debería ser de interés establecer distintas categorías de riesgo para la Argentina; entonces, para la categoría de riesgo más baja habría una ventaja y en aquellas de alto riesgo habría que proteger los bosques eficientemente”.
En lo que respecta al costo del desarrollo y operación de la plataforma Visec, Fisher dijo que “no se puede negar que la producción sostenible es más cara, pero la política de la Unión Europea implica tener la disposición a pagar más por esos productos; los mayores costos serán absorbidos por la Unión Europea”. Tal razonamiento, si bien puede resultar válido con las especialidades, difícilmente pueda aplicarse en el caso de los commodities.
En lo que respecta al impacto que la nueva normativa europea podría llegar a tener en los pequeños productores, el funcionario alemán indicó que se trata de “un desafío” y recomendó incentivar el dialogo con la Unión Europea y estar atento a los programas de apoyo que pueda haber por parte de la UE-27.
La delegación alemana, encabezada por el líder del Diálogo Argentino-Alemán sobre Innovaciones Agropecuarias Sustentables, Marnix Doorn, y el Agregado Agrícola de la Embajada de la República Federal de Alemania en Argentina, Hermann Intemann, visitó las provincias de Buenos Aires, Córdoba y Santa con el objetivo de mejorar la comprensión de las regulaciones recientes e intercambiar puntos de vista e inquietudes.
El pasado lunes 25 de septiembre se realizó la primera reunión de la semana en la sede porteña de la Cámara de la Industria Aceitera de la República Argentina (Ciara-CEC) con el objetivo de conocer el sistema Visec como mecanismo de respuesta por parte de sector agroindustrial argentino para ajustarse a la normativa europea.
La reunión continuó a media mañana en la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca. Allí, los expertos alemanes dialogaron con los subsecretarios de Agricultura, Delfo Buchaillot, y de Ganadería, José María Romero, quienes estuvieron acompañados por el director nacional de Agricultura, Agustín Pérez Andrich, y técnicos de la Dirección Nacional de Foresto Industria.
La recorrida continuó el martes 26 en la ciudad de Córdoba, donde actores clave del sector agro de la provincia participaron del diálogo técnico. En este marco, el Secretario de Agricultura, Marcos Blanda, destacó diferentes acciones que desarrolla el Gobierno de Córdoba, a través del Ministerio de Agricultura y Ganadería, para fortalecer una producción cada vez más sostenible.
El día miércoles 27 el punto de encuentro fue la ciudad de Rosario. Allí, productores de la provincia y representantes de diversas entidades productivas participaron tanto de manera presencial como virtual. El evento fue coordinado por la secretaria de Agroalimentos de Santa Fe, María Eugenia Carrizo.
El itinerario del jueves 28 de septiembre incluyó la visita de los expertos alemanes a un campo al sur de la provincia de Santa Fe, lo que permitió observar de manera directa el sistema de producción agrícola del país.
Espero que sean prudentes los que firman perjudicando al norte
Ahora vienen a imponer condiciones y los nuestros aprueban
Después que ellos diezmaron la selva negra ponen condiciones
Síganle el juego aún puñado de decadentes y desmemoriados como son los europeos y así nos va a ir, es lo que tenemos para vender si no les gusta que compren en otro lado….
No es ‘apartheid” agrícola. Recordemos que la discriminación violenta la igualdad cuando es arbitraria. En el apartheid sudafricano el trato desigual se daba por el color de la piel. Aquí existe una razón valida u que debemos apoyar: la destrucción de ecosistemas por los que el planeta esta dando, no gritos, sino alaridos de alerta .
Che Mario y si dejamos de deforestar?
Son vivitos los europeos, como no lograron doblegar aún al Mercosur, van por el único del bloque con permacrisis económica. Como ya se avisó en un ultimátum a la UE que si con Lula no logran cerrar un acuerdo0 sin leyes extraterritoriales para fin de año, en la siguiente presidencia pro tempore con Peña se buscarán nuevos mercados como prioridad y quedaría en un stand by secundario lo de la UE.
Con esto los europeos lograrán dos objetivos: desprender a Argentina del Mercosur y balkanizarla — las provincias del norte se empobrecerán a tal punto en la que ellos podrán comprar los campos a precios de ganga y eventualmente desplazar a la población local.
Por lo visto los europeos no piensan recuperar sus propios bosques, el plan es colonizar solapadamente territorio que aún está bien comparado con el de ellos.
La teoría es descabellada pero no imposible. Piensen.
Saludos.
En mi experiencia la dobe certificación va a servir. Pasa con lo orgánico y lo estándar. China compra todo y Europa lo suyo un poco más caro. Es verdad que tanto Europa como Estados Unidos diezmado sus bosques y ahora joven. Pero si pagan más se hace y sino que coman harina de grillos que para algo la certificaron
El título no tiene nada que ver con el contenido horrible la comparación del periodista escritor…
Qué buena analogía. Los blanquitos de la zona pampeana venderían soja clase 1 libre de deforestación y los oscuritos del norte soja clase 2 con riesgo de defortestación. Gran innovación. Seguramente será muy bien recibida…