A principios de los años ’90, con su privatización, el Mercado de Hacienda de Liniers dejó de realizar subastas con ganado porcino (sí, señora, antes en Mataderos se negociaban también con chanchos y hasta ovinos). Esta situación dejó a muchos productores de cerdos desguarnecidos, sin la necesaria referencia de precios y a merced de una demanda que suele tiene mayor poder de negociación.
Fue entonces cuando varios productores decidieron agruparse para vender sus cerdos, fortaleciendo su posición y facilitando a los frigoríficos conseguir en un único lugar toda la mercadería que necesitaban. Así nació PorMag, una suerte de cámara sectorial que en mayo pasado cumplió 25 años de existencia.
Pormag – Principal operador del mercado de cerdo en Argentina (página institucional)
Adrián Biogioanni es productor y fue presidente de esa entidad. Explicó a Bichos de Campo que “lo innovador fue exigirse la mejora desde todo punto de vista (incluyendo el aspecto productivo). por eso se llama PorMag, que significa porcino magro”.
Escuchá el reportaje al ex presidente de PorMag:
El ex directivo de la sociedad agregó que “todas las semanas se trata con 35 o 40 frigoríficos. Lo que hacemos es orientar al productor en la comercialización de su rodeo porcino durante las 52 semanas del año”. En total hay actualmente unos 70 establecimientos que aportan su producción para dar volumen al mercado.
A lo largo de los años, el crecimiento de este mercado fue tal que “si tomamos la información que da semanalmente el Ministerio de Agroindustria, estamos participando con el 12% de la faena nacional”, explicó Biogioanni. Se trata de un porcentaje similar al que tiene el Mercado de Liniers respecto de la venta de ganado bovino para faena.
El servicio que brinda el PorMag cobra dimensión en momentos complicados como el actual, cuando la falta de rentabilidad genera incertidumbre en muchos productores de porcinos y hasta fuerza la decisión de dejar la actividad en muchos casos.
“No terminamos de salir de un temporal complicado. La realidad es que la estructura de costos en un 75/80%o está dolarizada”, y entonces “cuando el dólar sube 1 peso el costo de producción sube 80 centavos”, indicó Biogioanni. Luego explicó que “el precio lo fija el mercado y el consumidor cobra en pesos. Eso nos llevó a un estado de crisis marcado, en el que desaparecieron muchos productores como fruto de esta circunstancia”.