Finalmente se confirmó la noticia menos esperada: la influenza aviar (o gripe aviar) de alta patogeneicidad ya tiene casos registrados en Argentina y Uruguay. El primero de ellos fue detectado en aves silvestres en la provincia de Jujuy, mientras que el otro se registró en el límite entre Maldonado y Rocha.
A partir de las 15 horas de hoy se espera una conferencia de prensa de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación, donde informarán las medidas de prevención adoptadas ante el hallazgo de casos de influenza aviar mencionados. En ese encuentro, funcionarios de las carteras de Agricultura, Salud y Seguridad, Senasa e INTA explicarán el dispositivo por implementar.
Referentes de la industria y la producción avícola manifestaron su especial preocupación por el caso en el país vecino, dada la cercanía con la provincia de Entre Ríos, donde se concentran buena parte de las granjas dedicadas al respecto.
En el mediodía de este miércoles el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca de Uruguay comunicó formalmente la detección de la muerte de cinco cisnes de de cuello negro en la zona de la Laguna Garzón debido al virus de influenza aviar de alta patogenicidad (H5) y dispuso la emergencia sanitaria a nivel nacional.
En la región ya se habían reportado casos en Chile, Bolivia, Ecuador, Colombia, Perú y Venezuela. En todos estos países, al igual que ahora en Argentina, se registra por primera vez en la historia. Bichos de Campo había adelantado que era una cuestión de tiempo que la influenza aviar H5 ingresará al país.
En algunos países latinoamericanos están instrumentando ya el sacrificio masivo de aves de corral cuando se da notificación de casos positivos a las autoridades sanitarias. Es una postal que no se descarta tampoco para la Argentina, aunque se desplegarán todas las acciones necesarias para que los casos ya presentes en áreas silvestres no pasan a planteles comerciales de aves.
El Senasa venía trabajando a contrarreloj para contener lo finalmente resultó inevitable. A finales de enero pasado dispuso afianzar en la frontera norte de la Argentina el refuerzo de la vigilancia epidemiológica para intentar prevenir el ingreso al país de la influenza aviar a raíz de la detección de la enfermedad en el departamento Cochabamba, en el centro del vecino Estado Plurinacional de Bolivia.
La Organización Mundial de Salud Animal sigue estos casos con especial atención, pues la enfermedad viene migrando a gran velocidad y ya casi no quedan regiones libres. “Esta enfermedad compleja está causada por virus divididos en múltiples subtipos (es decir, H5N1, H5N3, H5N8, etcétera), cuyas características genéticas evolucionan con gran rapidez. La enfermedad ocurre en todo el mundo, pero los diferentes subtipos son más frecuentes en ciertas regiones”, explicó ese foro multilateral.
Senasa había informado días atrás que la necesidad de estar alertas y detectar y atender posibles sospechas se genera a partir de la presencia de brotes de influenza aviar H5 en América del Norte y su actual dispersión hacia América del Sur a través de las rutas migratorias que las aves silvestres inician en época primaveral.
Desde el Senasa se hace hincapié en la necesidad de centrar ahora todos los esfuerzos en la necesidad de reforzar los procedimientos de respuesta inmediata que permitan evitar la propagación del virus por el territorio nacional y mitigar de este modo su impacto.
La influenza aviar de alta patogenicidad afecta a las aves tanto de corral como silvestres. Las aves acuáticas y playeras se consideran los reservorios naturales de estos virus y no suelen enfermarse, aunque esto parece estar cambiando, ya que se han detectado mortandades de estas especies relacionadas a la presencia de la cepa del virus H5N1.
La influenza aviar H5, una enfermedad que nunca fue detectada en la República Argentina, por lo que el país está reconocido como libre d ela misma, integra el “Grupo I” de las enfermedades de notificación obligatoria e inmediata consignadas en la resolución Senasa 153/21. Para su detección precoz, se requiere de la notificación ante el Senasa de cualquiera de los siguientes síntomas clínicos:
Aves silvestres
- Mortandad principalmente en aves migratorias, marinas y rapaces.
- Aves con depresión.
- Incoordinación
- Temblores
- Problemas respiratorios
- Diarrea y edema facial
- Aves de corral
- Elevada mortandad
- Sintomatología respiratoria: tos, jadeo, secreción nasal
- Sintomatología neurológica: temblores, movimientos circulares, tortícolis
- Reducción en producción de huevos superior al 5% durante más de dos días.
- Reducción en ingesta de alimento y agua superior al 20%.
Ante la detección de signos clínicos nerviosos, respiratorios, digestivos, disminución en la producción de huevos, en el consumo de agua o alimento o el hallazgo de aves domésticas y/o silvestres muertas, cualquier persona puede notificar al Senasa, a través de los siguientes canales:
En las oficinas del Senasa– personalmente o comunicándose por teléfono–; a través de la app “Notificaciones Senasa”, disponible en Play Store; enviando un correo a notificaciones@senasa.gob.ar y, en el apartado Avisá al Senasa de la página web.