Alguna vez, allá lejos hace tiempo, existió en la Argentina el impuesto al boludo: era un aporte especial que los automovilistas tenían que hacer supuestamente para mejorar los salarios docentes. Ahora, veinte años después, las provincias extra-pampeanas empezaron a reclamar al gobierno que cree un dólar especial para los productores de las economías regionales que se sienten unos boludos por la situación cambiaria: son aquellos que venden sus productos a un dólar oficial de 130 pesos y ven que a sus zonas llegan turistas que los pueden cambiar a más del doble, según la promesa del Banco Central.
Carlos Banacloy, el ministro de Producción de Río Negro, contó a Bichos de Campo que junto a sus pares de varias provincias han venido planteando a los ministros de Desarrollo Productivo, Daniel Scioli, y de Agricultura, Julián Domínguez, que intercedan ante el Presidente Alberto Fernández para que cuanto antes de defina un dólar especial para liquidar las operaciones de exportación desde las economías regionales. En el caso del funcionario patagónico, habló de las frutas del Alto Valle, de la lana de la meseta patagónica, de los productos de la pesca y hasta de los vinos.
Sin mencionar la palabra “boludo”, Banacloy mencionó el caso de un productor de ovinos de las afueras de San Carlos de Bariloche que verá a los turistas llegar a su ciudad para esquiar y que trocarán sus dólares billete por unos 300 pesos por unidad. El tipo, en cambio, por su lana de exportación o por la carne de sus corderos cobrará cada dólar producido a un tipo de cambio oficial según la cotización mayorista del Banco Nación. “¡Imaginate cómo se sentirá!”, planteó el funcionario rionegrino.
Banacloy alertó que para muchas economías regionales, las de su propia provincia o las del resto del país, es una cuestión “dramática” la enorme diferencia entre el dólar oficial (que además en los últimos años se retrasó bastante respecto de la inflación) y el resto de los dólares que existen en la economía local, empezando por el novedoso “dólar turista” que el gobierno prometió reglamentar en los próximos días.
Retrató el ministro de Producción de Río Negro que muchos de los insumos de esos productores regionales se han ido acomodando más cerca del dólar de mercado y eso perjudica seriamente las posibilidades de reinversión en sus propias actividades. Citó el caso de la energía, de los fertilizantes, de muchos agroquímicos y hasta el costo salarial, ya que las paritarias están arrancando con planteos de aumento que no bajan del 70%.
Frente a esto hay una visible pérdida de poder de compra de los productos de las economías regionales anclados al dólar oficial, que no han subido sus precios externos como los granos (como en el caso de lana) o que se colocan en el mercado interno y se colocan en pesos (como la manzana).
“Lo vamos a pagar muy caro este deterioro del aparato productivo”, advirtió Banacloy, que contó que son varias las provincias que están haciendo al gobierno este mismo planteo para generar un dólar diferencial para sus actividades productivas y poder resistir esta coyuntura cambiaria desfavorable, al menos hasta que se pueda implementar una esperada “actualización” del tipo de cambio.
El rionegrino señaló que una complejidad es que muchos productores de las economías regionales, como los frutícola del Alto Valle o los viñateros del Cuyo, suelen entregar sus cosechas a las industrias sin posibilidad de retenerla o almacenarla como sucede con la soja u otros granos. Luego van cobrando sus liquidaciones en varias cuotas a lo largo del año, pagaderas en pesos al tipo de cambio oficial. Ellos no liquidan como los sojeros. La inflación y la brecha cambiaria los liquida a ellos.
El único consuelo que tienen las economías regionales, a diferencia de la soja, es que el gobierno ya eliminó la mayoría de retenciones que tributaban hasta fines de 2021, y que por lo tanto no cargan con esa mochila adicional. Pero es apenas un paliativo que no parce alcanzar a remediar las distorsiones.
Excelente nota, clara y honesta, no solo tenemos tragedia educativa, tambien tragedia productiva