El gobierno de los Estados Unidos decidió suspender las importaciones de hacienda vacuna, caballos y bisontes desde México, lo que le agrega leña al fuego al convulsionado mercado de la carne vacuna
El Departamento de Agricultura de ese país anunció “la suspensión de las importaciones de ganado vivo, caballos y bisontes a través de los puertos de entrada de los Estados Unidos a lo largo de la frontera sur debido a la continua y rápida propagación hacia el norte del gusano barrenador en México en granjas de Oaxaca y Veracruz”.
Se espera que con esta medida se reduzca más la oferta de carne vacuna para el consumo interno en Estados Unidos, que atraviesa por un momento de reducción de su stock, de su producción de carne ya que México provee a ese mercado de hacienda para el engorde a corral y de ganado para la faena.
Se prevé que Estados Unidos este año importe carne por 2,2 millones de toneladas, 30% más que hace dos años. Por otra parte, su stock vacuno sería de 86,5 millones de cabezas, 2 millones menos que en 2023.
Esta suspensión del comercio obligaría a los importadores de Estados Unidos a pagar más por la carne que compran en Sudamérica o Australia, y eso incrementaría la competencia con China que también tiene necesidades de abastecimiento.
“Los stocks chinos de carne en abril son 20% menores a los de una aña atrás” dijo el consultor Rafael Tardáguila.
A todo esto, la suba arancelaria dispuesta por el presidente Donald Trump elevó los precios internos de la carne vacuna a 10% para las cuotas y a 36,4% para lo que se importa por fuera de esos cupos. Eso encareció la carne que pagan sus consumidores, porque lo que manda es la escasez de oferta en ese mercado.
“Estados Unidos tiene el stock vacuno más bajo en 70 años y los precios de la hacienda más altos de su historia. Los futuros de novillo en el mercado de Chicago cotizan en 7,70 dólares” dijo Rafael Tardáguila, director de Fax Carne.
El analista agregó: “La suba de los aranceles se trasladó al precio de la carne, Brasil le sigue vendiendo. En abril le exportó 34.000 toneladas por fuera de la cuota llamada ´Otros Países´ y por lo tanto con aranceles de 36,4%, más de lo que le vendió Australia que tiene aranceles de 10%”.
De acuerdo con las estadísticas del IPCVA y de APEA, los precios de la carne vacuna que se exporta desde Argentina siguen encima de los 8.000 dólares la tonelada, lo que significa que los aranceles nuevos no impactaron en los precios. Al respecto el analista Víctor Tonelli dijo que “los precios de la carne informados por la FAO, son los más altos en la última década”.
Según el documento del USDA, “el primer caso en México se informó a los EE. UU. en noviembre de 2024”, lo que llevó a la suspensión del comercio de hacienda. En febrero de este año se reanudaron las importaciones después de que los servicios sanitarios de ambos países acordaran un protocolo integral de inspección y tratamiento previo al despacho para garantizar un movimiento seguro y medidas para mitigar la amenaza de la plaga.
De acuerdo con lo informado por el organismo norteamericano, “cuando las larvas del gusano barrenador se introducen en la carne de un animal vivo, causan daños graves y a menudo mortales al animal. El gusano barrenador puede infestar ganado, mascotas, vida silvestre, ocasionalmente aves y, en casos raros, personas”.
El informe completo:
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