Uno de los principales especialistas en trabajo rural del país, el director del Centro de Estudios e Investigaciones Laborales (CEIL) del Conicet, el sociólogo Guillermo Neiman, está en carrera para integrar por cuatro años el directorio de ese organismo científico.
La elección, en la que Neiman compite con el doctor en Ciencia Política Mario Pecheny, se realizará hasta este jueves 31 de mayo y pueden participar los investigadores de la denominada “gran área de ciencias sociales y humanidades”, que suman unos 2.300 en total en todo el país.
El Conicet está conducido por un directorio de nueve miembros, integrado por un presidente, dos vicepresidentes y 6 directores. El presidente del organismo es propuesto por el presidente de la Nación y los ocho directores restantes son elegidos mediante el sistema de ternas. Cuatro de esas sillas, a la vez, surgen de los propios investigadores activos en cada una de las grandes áreas del conocimiento. Neiman, en este caso, compite por el lugar correspondiente a los investigadores de las áreas Ciencias Sociales y Humanidades.
De allí la curiosidad. En un mundo plagado de politicólogos, filósofos o sociólogos que suelen vivir de espaldas a lo que sucede en el agro, Neiman se ha especializado durante toda su carrera en estudiar la temática del desarrollo rural y los mercados de trabajo en el marco de los procesos de reestructuración de la economía agropecuaria. Además de ser licenciado en Sociología de la Universidad Nacional de Buenos Aires, ha logrado el título de “Master of Science in Rural Sociology” de la Universidad de Wisconsin-Madison, USA.
“Cómo investigador se dedicó a estudiar en profundidad el medio rural, el sector agropecuario y sus problemáticas sociales y productivas”, destacan sus colaboradores en el CEIL. Quienes apoyan su postulación afirman además que, si consigue un lugar en el directorio del Conicet, Neiman “buscará visibilizar las restricciones presupuestarias que atraviesa el organismo y que afectaron particularmente a las ciencias sociales, poniendo en peligro las contribuciones que se vienen realizando hacia el conjunto de la sociedad”.
“Entramos en una zona de riesgo. La restricción presupuestaria afecta a todos los rubros del organismo, y la reducción de los ingresos a la carrera de investigador, que es la vía por la cual crece la producción de conocimiento y el mismo Conicet, pone en riesgo la renovación de grupos y líneas de investigación”, declaró hace unos días el candidato al diario Página/12.
Según Neiman, el directorio del Conicet debe tener una posición mucho más activa frente al ajuste del presupuesto. “También debe acercarse mucho más a la comunidad científica, que está muy sensibilizada e interesada en dar continuidad a un proceso de crecimiento y producción de conocimiento que, en algunas líneas de investigación, nos pone entre los principales lugares del mundo”, evaluó.