Dos nuevas grandes compañías posaron sus ojos en la camelina, un cultivo invernal que hasta hace pocos meses no estaba en el radar de casi nadie, y ahora se consolida como la apuesta de las corporaciones.
A principios de julio de este año se conoció que compañías del calibre de Bunge y Chevron compraron en conjunto una empresa argentina especializada en este cultivo. A los pocos días de ese evento también fue noticia que Louis Dreyfus Company (LDC) y Global Clean Energy Holdings, Inc. acordaron promover conjuntamente el cultivo sustentable de Camelina sativa en Argentina, Paraguay y Uruguay.
Por estas horas se sumó otro emprendimiento conjunto de grandes compañías, encabezado por Syngenta y ADM, la primera una reconocida mega compañía agroindustrial de insumos y la segunda, una de las principales empresas mundiales de nutrición humana y animal.
Este sendero en el que se encuentran muchas de las grandes trasnacionales tiene relación entre el sector agroindustrial, la alimentación y especialmente las energías.
Es que la camelina se puede sembrar en invierno, ofrece una buena alternativa para los agricultores intensivos de muchas regiones de nuestro país antes de una siembra de maíz o soja, y por ahora da buenos dividendos económicos.
Para las empresas, es una solución a la generación de energía de origen vegetal, y como la camelina no se consume por los humanos, no compite contra otros cultivos que si pueden ser alimento, como el maíz por ejemplo, o la colza.
En este sentido ADM y Syngenta Group anunciaron que firmaron un memorando de entendimiento de colaboración para la ampliación de la investigación y comercialización de semillas oleaginosas, con bajas emisiones de carbono, y variedades mejoradas para satisfacer la creciente demanda de biocombustibles y otros productos de origen sostenible.
Este acuerdo prevé una colaboración en la que ADM y Syngenta aprovecharían sus capacidades existentes para acelerar la investigación, el procesamiento y la comercialización de nuevas semillas que normalmente se cultivan en el período de barbecho de una rotación de cultivos.
De acuerdo a lo que comunicaron en conjunto, las empresas tienen amplias capacidades que incluyen el motor de I+D de Syngenta, que ofrece apoyo biotecnológico, tratamientos de semillas y productos biológicos, además de conocimientos agronómicos de una red de expertos de campo locales.
ADM por su parte aporta la escala global y la experiencia logística, que incluye capacidades incomparables de producción y almacenamiento, además de una amplia red logística.
“Este emocionante MoU (memorando de entendimiento) con Syngenta demuestra cómo estamos trabajando con socios para unir toda la cadena de valor para respaldar nuevas tecnologías de semillas”, dijo Greg Morris, presidente del negocio Ag Services & Oilseeds de ADM. “Se basa en nuestras capacidades únicas al crear un camino para escalar el procesamiento de cultivos de cobertura, un proceso que ya hemos puesto a prueba con éxito. Esperamos trabajar con Syngenta para avanzar en este trabajo y seguir satisfaciendo la demanda de combustibles y otros productos de origen sostenible”.
“Syngenta está entusiasmada de unir fuerzas con ADM para brindar soluciones más sostenibles y rentables a los agricultores”, dijo Justin Wolfe, presidente de Syngenta Global Seeds. “La sostenibilidad es un factor fundamental de nuestra estrategia comercial. Creemos que colaboraciones como ésta son formas importantes de impulsar una innovación más rápida que ofrezca un mayor potencial de rendimiento y al mismo tiempo tenga un menor impacto en nuestro medio ambiente. El trabajo comenzará en América del Norte”.
Se espera que la demanda mundial de biocombustibles –como el combustible de aviación sostenible, que puede producirse a partir de una amplia variedad de materias primas, incluidas semillas oleaginosas como las previstas en este Memorando de Entendimiento– crezca en 35 mil millones de litros por año, o un 22%, durante el próximo período 2022-2027, según la Asociación Internacional de Energía.
Las empresas esperan firmar acuerdos definitivos para finales de año y ya están avanzando juntas en un importante trabajo en torno al cultivo y procesamiento de variedades de próxima generación.