Apenas años atrás las denominadas “carnes vegetales” parecían ser el futuro de la industria de los alimentos y amenazaban a la ganadería tradicional. Las inversiones de diversos fondos de inversión se volcaron a emprendimientos que buscaban reproducir con exactitud la textura y sabor de la carne de pollo, vaca o cerdo. Esa burbuja parece haberse pinchado, porque muchas de esas firmas directamente cerraron sus puertas o frenaron sus desarrollos. Sucedió que las ventas de este tipo de productos en todo el mundo están lejos de crecer e incluso se las denomina como “compras de una sola vez”.
El caso de Beyond Meat es quizás el más anecdótico. La empresa debutó en el Nasdaq en 2019 y alcanzó en aquel momento una valoración de mercado de alrededor de 15.000 millones de dólares. Incluso se la comparaba con la firma de autos eléctricos Tesla, por su ascenso meteórico y la preferencia de los grandes fondos de inversión.
Lo cierto es que la compañía mostró hasta el momento números apenas rentables y ventas que nunca terminaron de despegar. Actualmente su valor de mercado es de apenas 2.000 millones de dólares y sigue bajando. En 2019 su acción cotizó a más de 196 dólares, y apenas tres años después sus papeles rondan los 32,45 dólares. Un fiasco para aquellos que apostaron por las carnes vegetales.
“Quienes han probado la hamburguesa en general coinciden en que no es rica (tiene un dejo metálico) ni tan parecida al gusto de la verdadera. Los millenials prefieren la carne, y además la recesión que se avecina, afectará más duro a los productos más costosos al público. Pero tal vez lo más importante es que hay unos 20 productos combinados en esos sustitutos, muchos de ellos para nada saludables, y la población más sofisticada y con poder de compra desea saber qué está consumiendo”, explicó el agónomo Luis Villa, un apasionado y estudioso de estas tendencias. Para él, finalmente, “la carne artificial y los sustitutos vegetales terminarán ocupando una parte, 10 o 15%, del mercado. No más que eso”.
Por ahora, el ascenso y caída de Beyond Meat arrastró a otras grandes empresas que buscaban conseguir un lugar en lo que parecía ser el negocio del futuro. En la última década, estas firmas recaudaron una cantidad récord de dinero y solo el año pasado captaron más de 4.000 millones de dólares. Según los datos del sector hay más de 800 empresas que ofrecen productos de carne sin carne y el mercado está inundado de ofertas, pero hay pocos compradores.
Otra cuestión clave es que los chefs y restaurantes de todo el mundo tampoco optaron por sumar la carne vegetal a sus menús. Apenas se les animaron las cadenas de fast food con resultados poco rentables.
En definitiva, con la industria de las carnes vegetales en retroceso, las empresas buscan alternativas de impacto para seducir a los consumidores. Parece que ya no alcanza con proponer sustitutos para el pollo, la vaca o el cerdo y por eso van por experiencias directamente aterradoras.
Una empresa de Suecia llamada Oumph! lanzó incluso una edición limitada de hamburguesas vegetales con sabor a carne humana. Esto no es todo, porque con este innovador alimento los suecos se hicieron acreedores de un León de Plata en Experiencia y Activación de Marca en el Festival Cannes Lions.
1. A campaign for a vegan burger, that tastes like “human meat”, has won a Silver Prize at the Cannes Lions Festival of Creativity.
The burger was created by Swedish plant-based company Oumph! to convince meat-lovers that vegan products can mimic the taste of any meat. pic.twitter.com/7c5TWssw9D
— BFM News (@NewsBFM) July 4, 2022
A pesar de que la empresa aseguró que ningún ser vivo fue herido en el proceso, no se aclaró cómo fue el procedimiento para obtener el sabor a la carne humana.
Lo que sí se conoce es que este producto está hecho de soja, champiñones y proteína de trigo, así como grasas de origen vegetal y una mezcla de especias.
Increíble pero real: los veganos no se privan de nada, solo de consumir animales.