Comenzaron a reactivarse las registraciones de embarques de productos del complejo sojero –para tranquilidad del gobierno que necesita que se reabra la “canilla” de agrodivisas–, pero las ventas de poroto siguen siendo limitadas.
Este lunes se registraron Declaraciones Juradas de Ventas Externas (DJVE) por un total de 197.949 toneladas, de las cuales 86.248 corresponden a harina de soja, 34.984 a aceite de soja y 10.000 a poroto de soja.
Se trata de los primeros embarques del complejo sojero declarados con el nuevo esquema de derechos de exportación del 26% para poroto y del 24,5% para harina y aceite de soja vigente desde la semana pasada.
La demanda, tanto exportadora como industrial, viene haciendo esfuerzos por ofrecer precios con “premios” con el propósito de incrementar los volúmenes de compra de la oleaginosa.
El contrato Soja Rosario Septiembre 2025 cerró hoy en el mercado A3 en un valor de 295,7 u$s/tonelada con una suba intradiaria del 0,4%, mientras la posición Noviembre 2025 –que operó 53.300 toneladas en la jornada– terminó en 300,0 u$s/tonelada (+0,07%) y la de Enero 2026 finalizó sin cambios en 302,5 u$s/tonelada.
Considerando un valor FOB oficial de hoy de 403 u$s/tonelada y gastos de fobbing promedio de 12 u$s/tonelada para la soja condición cámara, entonces un valor de 295,7 u$s/tonelada cuenta con una retención teórica efectiva del 24,4%, es decir, se encontraría por debajo de la alícuota del 26,0%. Una situación similar se registra con la posición Soja Rosario Noviembre 2025.
De todas maneras, los esfuerzos de la demanda por originar mercadería no están siendo recompensados con ventas de los productores, dado que los volúmenes operadores siguen siendo acotados (tanto de la soja condición cámara como de la destinada a fábricas).
Es habitual que, ante turbulencias cambiarias, el grueso de los productores argentinos opten por privilegiar tenencias de soja como reserva de valor y generar liquidez con otros productos agropecuarios.
Por otra parte, muchos empresarios agrícolas argentinos esperaban una rebaja de derechos de exportación más profunda que la finalmente implementada por el gobierno de Javier Milei, que en definitiva volvió a implementar el mismo nivel de alícuotas vigente hasta el pasado 30 de junio.