La empresa Prodeman nació en 1984 de la mano del productor agropecuario Oscar Cavigliasso. En sus inicios su actividad principal fue la producción agrícola de cultivos tradicionales, pero poco tiempo después sumó el maní y a partir de allí se abrió un mundo de posibilidades. Hoy esta compañía es una de las líderes en ese segmento, con fuerte foco en el agregado de valor en origen. No solo exporta maní principalmente a Europa sino que también vende en el mercado interno con su marca Maní King y factura anualmente más de 20.000 millones de pesos.
Su foco de operaciones está en la localidad de General Cabrera, provincia de Córdoba, pero la empresa también produce y origina maní de provincias tales como La Pampa, Buenos Aires, Tucumán, San Luis y Catamarca. La compañía produce al año unas 45.000 toneladas de maní, acopia 150.000 toneladas y procesa anualmente el mismo volumen. Cuenta además con una capacidad de secado de 2.000 toneladas y exporta unas 70.000 toneladas, principalmente al mercado europeo.
Su producción se focaliza en el agregado de valor en origen y en su planta de General Cabrera produce diversas variedades, como maní confitería, blancheado, tostado, frito, crocante, garrapiñada, maní con chocolate, pasta de maní y grana, entre otros productos.
En el mercado interno abastece a granel y bajo su marca Maní King, que lanzó en 2011. Ofrece además el servicio de marca blanca, es decir que produce y envasa para terceros, principalmente grandes cadenas de supermercados.
Para lograr mayor eficiencia en el uso de los recursos, la empresa puso en marcha en 2018 la Central Térmica de Generación de Energía Eléctrica OC Bioenergía, que utiliza biomasa de la cáscara de maní y la transforma en energía eléctrica. Esta usina cuenta con una turbina de vapor de 10 megavatios (MW) de potencia, con capacidad para generar 78.840 MW/hora.
La empresa usa el 10% de la energía para su funcionamiento; el 25%, para el proceso de industrialización del maní (lo que significa unos 17.000 MWh anuales que antes le compraba a la cooperativa eléctrica de la zona), y el 65% restante lo incorpora a la red nacional. Esa cantidad permite abastecer a unos 8000 hogares al año.
En esta línea y con el objetivo de continuar aprovechando los residuos productivos está incursionando en los biomateriales. Más específicamente utiliza las cenizas resultantes de sus procesos productivos para la fabricación de ladrillos que luego distribuye en su zona de influencia.
Prodeman emplea en forma directa a más de 600 personas y cumple un rol clave en General Cabrera, una localidad con 12.000 habitantes. El intendente actual es Guillermo Cavigliasso, uno de los hijos del fundador de la empresa. En la última elección se impuso con 77% de los sufragios de sus vecinos.
Aunque el grueso de su facturación corresponde a ventas en el mercado externo, desde hace varios años está creciendo a paso firme en el mercado local. Aquí la pasta de maní es uno de sus productos más demandados, según explican desde la firma. Por eso cinco años atrás producía apenas 10 toneladas de este producto en frasco con una demanda acotada, pero hoy producen y venden más de 1.000 toneladas al año.
Hacia adelante los planes de la compañía continúan centrados en sumar mayor capacidad productiva, crecer en exportaciones con particular foco en productos con alto valor agregado. La firma continúa siendo comandada por la familia fundadora Cavigliasso. Incluso otra hija, Laura, es directora en Prodeman y hasta poco tiempo atrás fue presidente de la Cámara argentina de maní.
En lo que respecta a su facturación, según los datos suministrados por la empresa a la CNV, sus ventas alcanzaron en 2022 los 20.774 millones de pesos, de los cuales 14.112 millones correspondieron a ingresos por ventas en el mercado externo y 6.662 millones al mercado interno.
En tanto, según los registros del BCRA su deuda bancaria asciende a poco más de 8.600 millones de pesos, toda en situación 1 (normal, sin atrasos en los pagos). El 28% tomada con el banco Superville, el 27% con el Galicia y el 15% con el Banco Provincia de Córdoba, el resto se divide en menor medida entre otras entidades bancarias y crediticias.