A mediados del año pasado se conocía una normativa del Instituto Nacional de Yerba Mate (INYM) para poner límites a las nuevas plantaciones de yerba de solo 5 hectáreas por productor, algo completamente inédito en un país como la Argentina, que desreguló por completo su actividad agropecuaria a comienzos de los 90.
La medida del INYM se adoptó mediante la Resolución 170/2021 –que luego fue ratificada por el Ministerio de Agricultura a través de la Resolución 152/2021– y se propuso realizar un ordenamiento de la actividad a partir de enero de 2022, estableciendo restricciones a la incorporación de nuevas hectáreas productivas.
La medida, que según sus impulsores busca salvaguardar a los colonos, fue ampliamente cuestionada por las empresas más grandes del sector. Tal es así que se dio lugar a una medida cautelar a pedido de La Cacheura SA, la elaboradora de la marca Amanda, en el Juzgado Federal de Paso de los Libres en Corrientes.
Sin embargo, aún con estos reclamos vigentes ante la justicia, la resolución del INYM entró en vigencia.
“El Instituto Nacional de la Yerba Mate recuerda que a partir del corriente mes de enero se encuentra en plena vigencia la Resolución 170/2021 que propone un ordenamiento de la actividad yerbatera respecto a la incorporación de nuevas plantaciones. La resolución tiene como objetivo fortalecer la sustentabilidad del sector, poniendo en un plano de igualdad a grandes, medianos y pequeños productores para que puedan desarrollar nuevas plantaciones”, indicó la entidad en un comunicado a comienzos de este mes.
¿Qué determina la medida? Que todos los productores inscriptos podrán incorporar hasta 5 hectáreas de nuevas plantaciones, y podrán implantar anualmente hasta el 2% de las superficies de yerbales ya existentes y declarados ante el INYM. Además estarán habilitados para reponer todas las plantas secas o muertas dentro de un lote ya declarado, sin alterar la densidad original de la plantación.
Para realizar nuevas plantaciones, los productores inscriptos en el Registro de Operadores de Sector Yerbatero deberán solicitar una autorización con una anticipación mínima de 30 días, y deberán indicar el punto GPS de esa nueva incorporación.
“El Plan Estratégico 2013-2028 para la Yerba Mate Argentina busca hacer realidad una actividad yerbatera con la mayor cantidad de actores, competitiva, socialmente responsable, equitativa y ambientalmente sustentable, que ofrezca al mundo productos naturales, genuinos y de calidad, por lo que se propone una medida encaminada hacia ese objetivo”, afirmaron desde el INYM.