Los productores argentinos de leche, en el promedio construido por el SIGLEA (Sistema Integrado de Gestión de la Lechería Argentina), cerraron en 2018 con un precio pormedio de 9,28 pesos por litro entregado a la industria. Esta cifra implicó una suba del 3,9% en relación al mes anterior (noviembre), y de nada menos que 62,5% respecto a diciembre de 2017.
Impresionante, diría algún desprevenido. El razonamiento sería que los precios de la leche al productor subieron veinte punto por encima de la inflación general que se registró en el país el año pasado, por lo que necesariamente debería haber subido el poder de compra del producto. La conclusión, que los tamberos han mejorado considerablemente su situación.
Medida en sólidos útiles (grasa butirosa más proteína), el precio de cierre de la leche fue de 137,51 pesos por kilo. También en este caso, según las cifras oficiales, la recuperación de los valores pagados al productor supera el 60% respecto a igual mes del año anterior.
Pero se trata de un espejismo. Y lo explicó muy bien la página especializada Dairylando.com. “En moneda constante, los 9.28 pesos por litro de diciembre 2018 tienen una capacidad de compra 15% menor a la de diciembre 2014, año previo a la crisis”. En aquel momentos, a valores actualizados, la leche llegó a valer 10,96 pesos. Y en diciembre de 2017, un año atrás, también valía más que ahora: 9,93 pesos por litro.
En un trabajo reciente, DairyLando cita un informe elaborado bajo el convenio INTA-IAPUCo sobre la evolución reciente de los precios de la leche, donde los valores fueron ajustados por inflación mayorista del INDEC, convirtiendo los precios corrientes publicados por IAPUCo en precios constantes de diciembre 2018.
“El análisis arranca en noviembre de 2016. Hasta marzo de 2017 constituye una muestra del período pierde-pierde que abarcó los 19 meses previos al inicio de éste convenio donde el precio pagado por la materia prima no cubría los valores necesarios para cubrir costos de producción de la materia prima y excedían también los valores posibles de abonar por la leche. A partir de abril 2017 y hasta septiembre de 2017, el sistema generó valores netos positivos. Pero a partir de enero 2018 los costos de producir leche copiaron la evolución de la inflación mientras el precio percibido por el productor como también los valores de referencia industriales perdieron poder de compra”, describe el informe.
Agradeceríamos citar la fuente cuando utilizan nuestros gráficos: “Precio de la Leche por Provincia – diciembre 2018”. Gracias. Saludos